Muriendo en vida.

¿LAS EMOCIONES PUEDEN ENFERMAR?

 14 de Diciembre del 2022.

Descubrí lo que tengo hacía a ti.

Es doloroso saber que tengo dependencia emocional. Cuando aún estábamos en la relación, también la tuve, por eso lo considero como lo peor que he vivido. No nací, ni crecí con afectos de cariño, tengo que confesarte que también busqué una figura paterna en ti.

Es tonto pensar que solo basta que me digas una palabra linda y mi corazón se emocione e ilusione.

Me gustas aún, es una estupidez seguir llorándote mientras eres feliz con otras.

Eres un ser humano tan imbécil porque, a pesar que tenías atención no te bastó aquella y buscaste en otras mi esencia.

Soy una estúpida y masoquista por seguirte escribiendo sabiendo que ahora respondes tan frío, te convertiste en una persona paracetamol.

¿A qué jugamos?, ¿quién gana?

Te amo mucho, demasiado. Tengo esperanza que logres cambiar tu actitud de un completo mediocre porque, reconozco que eres un ser frágil, bipolar, inmaduro, pero tú me salvaste esa noche desesperada. Tú lograste calmar mis ganas de llorar por minutos, pero lo hiciste. Por eso tengo esperanza en ti, pero tus acciones y tus palabras se ven contradictorias.

Me enoja saber que tengo dependencia emocional, porque solo me bastó un mes para sentirme bien, sin estar confundida, sin estar insegura, a pesar que te extrañaba, pero esa fue la única vez que logré pensar en mi salud mental. Creo que lo necesito ahora. Me estoy sintiendo culpable porque, si tan solo hubiera demostrado todo lo que yo sentía, si hubiera sido más cariñosa ese día, todo estaría mejor, según yo. Una parte de mí, me dice que ese es el inicio de una venganza dulce y justa. El poder no pensar, me hace trizas las opciones de escape y me incitan a optar por ese bando.

Mi corazón y mente viven en constantes peleas, el estar "bien" y "mal", pero las dos llegan a un acuerdo en donde aclaran que nunca más van a llegar al borde del colapso por un hombre.

Agradezco haber podido compartir recuerdos hermosos y especiales, agradezco el hecho de que me mostraste tus actitudes más crueles y desafiantes, porque gracias a ellas puedo librarme de las "Red flags".

Nunca tuviste una RESPONSABILIDAD AFECTIVA muy activa, la verdad no sé si tienes aquel don o no, pero bueno. Te odio por no tener eso, pero te amo por tu escucha asertiva, por tu manera de pensar e indagar cada vez que te cuento algo.

Es un hechizo el que tiene tus ojos, me enamoran mucho, pero mienten tanto.

Las emociones aterrantes que tengo hacía a ti, me están enfermando, me tienen tonta, boba y eso está muy mal, no es sano sentirme cansada o estresada. Te odio, solo dime, ¿qué es lo que quieres?

Pero no quiero ser "PLATO DE SEGUNDA MESA", no voy a competir con nadie.

¿Qué hago?

¿Me voy?

¿Te espero?

¿Sigo con mi vida?