7.5. De no ser por aquella conversación

409 32 0
                                    

Timba llevó a Mayo hasta su casa, pues querían tomarse su tiempo para hablar, y algo de privacidad no les vendría mal. En cuanto entraron, Timba invitó a Mayo a acomodarse en la acogedora sala mientras él iba a la cocina por un poco de agua para ambos.

En cuanto volvió, Timba le entregó un vaso a su compañero y preguntó sin titubear —entonces, ¿qué ocurrió?

—Yo lo arruiné —, Mayo bajó la mirada y no parecía tener la intención de continuar hablando.

—Vale, no te traje para escuchar cómo te lamentas por tomar decisiones precipitadas. Quiero saber por qué besaste a Víctor y todo lo que ocurrió hasta el momento en que Rius, Víctor y tú llegaron a donde yo estaba —Timba estaba serio, ambos lo estaban, pero había que saber lo que había pasado para poder resolver el problema, en el cual estaba metido desde el momento en que se le ocurrió hablar durante aquella breve discusión.

—...bien —, Mayo suspiró.

No le era fácil hablar por la culpa que sentía, ya ni si quiera le encontraba sentido al razonamiento que lo llevó a actuar como actuó, y es que es mejor no tomar decisiones estando triste. Se bebió toda el agua que le fue ofrecida y finalmente se dispuso a hablar, Timba escuchó con atención.

—Después de enterarnos de su relación, creí que había perdido a Víctor para siempre y me culpé por ello... sabía que no tenía derecho de intervenir o reclamarle nada, creía haber renunciado a él — dijo y luego de una breve pausa continuó: —pero después, cuando te vi con Rius en la playa y luego al día siguiente él aún parecía enamorado de ti...

Timba recordó aquellos momentos y mentalmente contradijo a Mayo, por supuesto que no parecía que Rius siguiera enamorado de él, había cambiado por completo, incluso si Trolli y Mike pensaban igual que el chico que estaba frente a él.

—Lo pensé, y aún creo que es imposible que ellos dos estén enamorados. No puede tener más de un mes que Víctor no paraba de decir canto me amaba, y seguramente te pasa lo mismo con Rius —, esta vez, Timba lo interrumpió.

—Era obvio que no nos esperarían para siempre, somos idiotas... —, suspiró.

—Se que no me equivoco en eso, aún nos quieren, pero tienes razón: somos idiotas, no iban a esperarnos siempre y encontraron un consuelo en el otro, por eso están juntos. La cosa es que, tras pensar en aquello, quise arreglar las cosas con Víctor, el plan era disculparme por todo y hacerles ver a ambos que no estaban enamorados. Así tú podrías estar con Rius, yo con Víctor y todos contentos.

—¿No te parece un pensamiento un tanto egoísta? No nos los merecemos...

—Sí, ya lo sé, pero en ese momento parecía tener sentido. Fui a casa de Víctor, pues quería encontrarme solo con él primero, y después de que habláramos iríamos juntos a ver a Rius y se lo explicaríamos todo, esperaba que él lo entendiera, le diría que no había por que lamentarse porque era seguro que te gustaba... 

A Timba esa idea se le hizo familiar. Pues fue la propuesta que Trollino iba a hacer antes de que Mike la dijera por él como una tontería impensable, solo que con distintos personajes; y con lo que hizo Mayo quedó demostrado que Mike tenía razón: era una tontería. Que, por cierto, Timba hubiera hecho de no ser por aquella conversación con sus amigos.

—Estando allá, él no quiso escucharme después de que fuera obvio lo que le iba a decir, que lo amaba igual que él a mí, y solo pude pensar en besarlo y esperar que ocurriera lo mejor. Yo no sabía que Rius estaba en el patio de su casa haciendo alguna cosa, creí que lo peor que pudo haber ocurrido era que él me rechazara y luego todo quedaría en el olvido —poco faltaba para llegar al final de su explicación.

—Y entonces resultó que justo cuando besaste a Víctor el pollo entró a la casa y al verlos salió corriendo, ¿no?

—Sí, Víctor no dudó ni un segundo en salir corriendo tras él, yo me tardé más en reaccionar y me arrepentí de lo que había hecho, los seguí al instante y el resto ya lo sabes.

—Valla...

El Riumba Is RialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora