[Lynn]
Me levanté esa mañana como de costumbre. Me puse unos jeans negros ajustados con una camisa blanca y unos tirantes morados, sobre esto, el suéter de Ted; Lo había lavado la noche anterior porque no quería que se ensuciara demasiado.
Fui al baño y me lavé la cara, al mirarme en el espejo pude ver que todavía tenía pequeños rasguños en mi cara, pero eran no me causaban tanto dolor. Me arreglé un poco el cabello y traté de olvidar mi reflejo, el cual no se veía tan bien como antes, todo por culpa de Lehia. Pero no me iba a concentrar en eso, tenía otras cosas en las que pensar.
Primero, en Ted y en qué pasaría con nosotros, después del beso de la noche anterior dudaba que todo volviese a ser igual, pero aún así quería conocerlo mejor, saber todo sobre él..., no quería que todo fuese muy rápido, deseaba hacer las cosas a mi manera: lento, pero seguro.
Por otro lado estaba lo que había pasado el día anterior, lo de la nieve, las dos yo y el tiempo que se detenía, entre otras cosas tantas cosas. ¿De verdad teníamos poderes? ¿o fue sólo que fantaseamos bastante?
Astrid optó por la segunda opción, Ali y yo seguíamos insistiendo en que es la primera, pero como nosotras de por sí no podíamos saber nada, a las niñas se les había ocurrido entrar a la oficina de la directora.
«¡Se han fumado una!, ellas sí que se han fumado una, yo, una niña bien, ¿Entrar a la oficina de la directora sin permiso? ¡Nunca en la vida!»
Acababan de levantarse cuando me puse a leer un libro que Ted me había regalado antes. Era sobre el espacio y mientras más lo leía, más me interesaba; Parecía haber otra galaxia, la llamaban La Vía Láctea, y en ella habían unos cuantos planetas. Entre ellos, el mas interesante de todos según mi punto de vista, la Tierra.
Un lugar que sonaba como el paraíso, nosotros le decíamos el mundo de los mundanos, realmente nunca nos interesó mucho ese lugar, simplemente sabíamos que habían personas parecidas a nosotros, pero sin poderes..., ¿Cómo podían vivir sin poderes?, ni idea, parecía que Ted sabía mucho de ese lugar, me hubiese gustado que me hablase de él algún día.
Alice salió del baño toda maquillada, definitivamente iba a ver a Aarón, sólo se ponía así para verle. Mientras tanto, Astrid abría la puerta, se iban a su especie de "Misión de Infiltración", me parecía una locura.
─Lynn, ¿Estás segura de que no vienes? ─preguntó Alice en un último intento de hacerme ir, negué con la cabeza mientras ponía cara de desaprobación.
─Niña bien... ─dijo Astrid mientras me miraba con cara de indignada─, eso no está bien, tú tienes que ser hardcore, como nosotras. ─siguió, ellas rieron a carcajadas, a mi no me parecía gracioso, seguía molesta por lo que iban a hacer.
─Bueno, que te diviertas con tu... oso, pero no demasiado, no queremos mini-Lynns corriendo por todos lados. ─rió Ali.
─Al menos no tendrás que ver a mi odioso hermano y a Alice haciendo cosas en el escritorio de la direct... ─comenzó a murmurar Astrid, pero Alice no la dejó terminar y ambas salieron de la habitación cerrando la puerta a sus espaldas.
Me acosté de nuevo en la cama y me puse a leer, pero, por alguna razón, algo me inquietaba; No podía descansar, sentía ansiedad, así que decidí salir a tomar aire fresco.

ESTÁS LEYENDO
We're Different
FantasiaEn un mundo mágico, gobernado por los cuatro elementos: agua, aire, fuego y tierra, tres chicas se dan cuenta de que no son cómo los demás, amantes de la naturaleza y protectoras de animales, deberán utilizar sus poderes para seguir adelante. Pero...