A tu ritmo || Zarry Stylik

Capítulo 12

Tres días pasaron, más lento de lo que hubieran imaginado. Anne y Harry se reunieron para hablar al segundo día, pero por más que Zayn y Niall le preguntaron a Harry sobre qué hablaron, el rizado se negó a contarles. Lo único que saben es que Anne y Harry salieron muy temprano una mañana y volvieron entrada la madrugada. Zayn ya estaba dormido cuando el rizado regresó, ni siquiera intentó colocar su bolsa de dormir, sino que fue directamente hacia la cama de Zayn y se acurrucó con él.

El moreno jamás contará cómo lo escuchó sollozar en silencio y cómo sus brazos se aferraron a él como un salvavidas. Zayn lo abrazó de vuelta, tiernamente, y por primera vez se atrevió a besar su frente. Al hacerlo revivió un recuerdo de su niñez, de cuando un Harry muy pequeño se había caído al tratar de salir de la caja de arena y se había raspado la rodilla. Anne le pidió que se quedara con él mientras ella iba por un poco de agua, y Zayn besó la rodilla del rizado justo arriba de su herida. Su primo lo miró con ojitos de cachorro y el moreno tuvo un fuerte impulso de besar su frente, pero había escuchado decir a sus amigos de la escuela que eso era de maricones, él no sabía qué significaba eso, pero se escuchaba muy mal, así que se contuvo hasta que llegó Anne. Sin embargo, esa noche todo se sentía diferente, él ya había hecho las pases con su sexualidad y se había enamorado de la persona menos indicada, y aunque era prohibido, Zayn no se iba a privar de ceder a sus impulsos aunque sea una vez.

Luego de esa noche, las cosas se relajaron un poco. Anne casi no habló, tanto ella como Gemma se la pasaron pegadas a Harry, acariciaban su cabello y besaban su frente, Anne incluso se acurrucó con él en el sofá y recargó su cabeza en el hombro del rizado mientras ella tomaba una rápida siesta. Todo parecía estar agarrando su rumbo, excepto por una cosa.

Seguían sin saber nada sobre Liam. Tampoco es que fuese una eternidad, pero el año nuevo estaba a la vuelta de la esquina y se sentían como si el tiempo pasara cada vez más y más lento. A pesar de que Anne parecía ya no estar enfadada con alguno de ellos, tampoco les dejaban salir tan lejos y por tanto tiempo, así que lo más lejos que habían llegado era a una tienda de conveniencia a tres cuadras de la casa.

Por otro lado, el frío empeoraba cada día más, y al caer la noche Harry se hacía el valiente diciendo que él dormiría en la bolsa de dormir en el suelo para que Niall pudiera descansar en la cama de invitados, pero cuando el rubio comenzaba a roncar, Harry se escabullía en silencio hacia la cama de Zayn, y antes de cada amanecer, ya era común para el rizado despertar para volver de mala gana a su bolsa de dormir.

Zayn estaba encantado con la nueva manía de su primo, adoraba poder protegerlo del frío y despertar abrazando su cintura. Las primeras veces Harry se tensaba y se congelaba en su lugar, pero ahora era tan normal para ellos como respirar. La única desventaja, al menos para Zayn, era que a la mañana siguiente despertaba con una erección que quemaba y lo peor era que, sin su privacidad, no podía hacer algo para solucionarlo, así que las duchas de agua fría se habían convertido en sus aliadas. Y sí, era tan frustrante como sonaba. No es que fuese un muchacho hormonal, simplemente son cosas que no se pueden controlar, o al menos eso es lo que se repetía cada mañana mientras oraba para que Harry no lo sintiera en algún momento de la noche.

La misma tarde que Harry salió con Anne y Gemma, Zayn recibió la llamada de Chad, uno de los guardias de seguridad en Neón. Era raro que Chad se comunicara con él fuera de las horas de trabajo, así que atendió de inmediato. Al inicio, Chad le había preguntado por Harry, y si creía que el menor sería capaz de pasar al estrado a testificar. Niall había alcanzado a escuchar la conversación (era imposible no hacerlo cuando se la pasaban casi que encerrados en la habitación de Zayn), el rubio de inmediato se negó, demasiado consciente de lo que eso podría significar para Harry. Con un suspiro, su compañero entendió y le informó que el club se haría responsable por el ataque que había sufrido Harry y que el proceso legal lo había tomado el mismo dueño en persona. Zayn no se lo podía creer, estaba sin palabras y se sorprendió todavía más cuando Chad le dijo que él mismo se había ofrecido como testigo junto con nada más y nada menos que Liam Desaparecido Payne, ya que tanto Chad como Liam habían estado presentes durante el ataque.