Dos Extraños

A un beso

Lia, Lia, Lia- decían mi nombre, hasta que desperté 

 - ¿Qué? – dije un poco molesta, era mi padre 

 - ¿Qué haces en mi cama hija? – pregunto el 

 -te voy decir pero no quiero que pienses nada malo – le dije nerviosa 

 - me estas asustando 

 -lo que pasa es que ayer como llovió Lucas ya no se pudo ir, entonces le dije que se podía quedar y él está dormido en mi cuarto 

 -okey, ¿no pasó nada de lo que me tenga que preocupar? 

 -no, no pasó nada malo ...

 -te creo, no es por correrlo, pero ¿A qué hora se va a ir? 

 - pues cuando despierte supongo, porsierto ¿Qué hora es? 

 -son las 7:50, ¿Por qué? 

 - ¿regreso la luz? 

 - sí, regreso en la madrugada, deberías de ir a ver si tu amigo ya se despertó 

 - voy a ver

Salgo de la habitación y me dirijo a la mía con unos pequeños nervios de saber si ya estaba despierto, abro la puerta lo más silencioso que puedo, me asomo y lo veo que aún sigue dormido, (como quisiera estar a su lado), cierro la puerta para dirigirme a la habitación de mis padres cuando se escucha el despertador, había olvidado apagarlo, regreso a mi habitación para encontrarme ahora si a Lucas despierto.

-hola, buenos días- dice el medio despierto 

 - buenos días – le regreso el saludo 

– olvide apagar el despertador lo siento 

 -no te preocupes 

 -¿Cómo dormiste? 

 –bien y ¿tu? 

 -qué bueno e igual bien 

 -me da gusto que hayas descansado 

 - ¿quieres desayunar? – le pregunte 

 -sí, ¿quieres que ayude en algo? 

 -no te preocupes

Salí de la habitación y me dirigí a ver a mi padre, pero él ya estaba dormido, decidí en no molestarlo y mejor dejarlo descansar, bajé a la cocina y me puse hacer la mezcla de hot cakes porque no se me ocurrió otra cosa para hacer, mientras batía los ingredientes entro Lucas a la cocina y se volvió a ofrecer en ayudar a lo cual me volví a negar, puse el surten y comencé a hacerlos no me salían, me salían todos rotos; Lucas se volvió a ofrecer argumentando que a él si le quedaban esta vez sí accedí, no había visto unos hot cakes tan perfectos se veían como los que vez en Instagram.

Desayunamos y nos la pasamos platicando, otra vez no se tocó el tema de lo ocurrido el día anterior es como si nunca hubiera pasado, cuando me di cuenta eran las 11:00 nos la pasábamos tan bien que perdimos la noción del tiempo, recogí lo trates y los puse en el fregadero, Lucas se ofreció en lavar los trastes y me negué.

-oye, ¿dónde está para cambiarme? – me pregunta 

 -a si ahorita te la doy

Me dijo a la lavadora agarro su ropa y me doy cuenta de que sigue mojada, asique regreso y le digo

-sigue mojada tu ropa, mejor quédate con la que traes y ya en tu casa la secas 

 -bueno está bien, ya después te regreso esta 

 -te la regalo 

 -no como crees 

 -si quédatela, tú no te preocupes te la regalo 

 -te lo compensare después – responde el chico 

 -cambiando de tema, ¿me acompañarías a dejarle unos libros a Kanu y a Sheccid? – le pregunte 

 -claro 

 - okey déjame avisarles

Les mando mensaje a Sheccid para avisarle de la entrega de los libros, después de unos minutos me contesta diciendo - ¨si puedes entregarlos en 10 minutos porfa¨ - a lo que le respondí - si claro, ¿en dónde nos vemos? – ''nos vemos donde me subo al transporte'' - me respondió.

-entonces, ¿a qué hora vamos? – me pregunta Lucas. 

 -en 10 minutos. 

 –va.

En esos 10 minutos me cambie, tome los libros, le avise a mi padre y agarre la correa de la vaca para salir con ella, Lucas agarro una bolsa que contenía su ropa y también agarro su libro, para salir hacia la calle. Mientras nos dirigimos al punto de encuentro con el par de hermanos, Lucas me está contando de que se trata el libro y que le está gustando, a lo que le pregunto - ¿en lo que vas del libro me lo recomiendas? – me responde con un - ''si'' -; cuando llegamos Sheccid y Kanu ya estaban esperándonos.

-hola - les digo junto con Lucas 

 -hola – también responden, con una cara entre sorprendidos, emocionados y confundidos por verme con Lucas. 

 -aquí están sus libros – les digo para que no empiece un momento incómodo. 

–gracias – me dicen extendiendo su mano con el dinero 

 - de nada – les digo tomando el dinero 

 - bueno ya me voy – dice Lucas 

 - nosotros también ya nos vamos 

 - bueno nos vemos el lunes – les digo

Se van Sheccid y Kanu para quedarme a solas con Lucas, ninguno dijo nada por unos minutos hasta que pasa... otro beso, nos separamos y ninguno decía nada, se formó un silencio en el cual ambos queríamos decir algo, pero ninguno encontraba las palabras exactas, tu mirada expresaba lo que sentías y supongo que también la mía, ambos sabíamos que a un beso nos perdíamos el uno con el otro, porque ninguno de los dos le prestaba la atención al exterior, hasta que paso... se rompió el silencio con un sonido, ambos volvimos a la realidad.

El resto del día me la pase recordando en ese momento que parecía irreal.