Desde tus Sueños

Capítulo 31

Después de ya haberse propuesto cambiar su vida, Aylín estaba a la espera de varios puestos de trabajo, no podía seguír así, debía distrerse y por sobre todo ganar dinero, si bien había ahorrado una buena cantidad, no le sería eterna, agradecía mucho el que su madre le hubiese inculcado la conducta de ahorrar, una nunca sabe, y más que nunca razón tuvo.

Extrañaba a Megan, sus reuniones a cenar contándose todo, pero no debía tentarse a hablar con ella, ya una vez le dio su dirección a Kyle y quien le aseguraba que no lo volviese a hacer, no era con maldad alguna, pero ahora todo había cambiado, no volvería a verlo nunca más, por su bien y por el de su hijo.

Fueron dos meses muy intensos, donde muchas veces no caía en sí como su jefe podía haberse fijado en ella, pero el tiempo solo le propinó una cachetada para que no se confiara tanto.

Ante el silencio total que la rodeaba, dio un salto al sonar su celular, lo miró apresurada y automáticamente contestó.

-Hola, si, ella habla....si por supuesto...mañana estaré a primera hora...gracias!!!- dijo emocionada.

Por fin el tan mentado trabajo se le dió, sería secretaria de un abogado, el cual le resonaba su apellido...pero de donde?
Comenzaría desde lo bajo, aprendería por sobre todas las cosas, si bien los bienes raíces era lo que ella mejor manejaba, de seguro, aquí aprendería algo de leyes, que loco!!!

Aylin se presenta a la cita con su nuevo jefe, la recepcionista la hace esperar un momento. Sentada en esa antesala a su nueva vida, sin darse cuenta ve que sale de esa oficina alguien que jamás pensó ver en su vida.

-Señorita Deveroux??...Aylín??..eres tú???- dijo sorprendido.
- Phillip....ohh cuanto tiempo!!!!- dijo igual de sorprendida.

Ambos se saludaron con un abrazo efusivo, habían pasado varios años desde que coincidieron en la Universidad, pero Phillip decidió seguir otro rumbo.

- Ven, pasa a mi oficina.
- Qué alegría verte Phillip...se vé que encontraste tu camino, las leyes!!!
- Ohh sii, me costó mucho volver a empezar, pero acá estoy, haciendo lo que me gusta. Y tú?.. porqué quieres ser secretaria? Tus estudios en finanzas no lograron llenar tus espectativas?
-Sii, estuve en bienes raíces un tiempo, no mucho, pude aplicar lo que sé, pero...decidí cambiar de trabajo y de lugar, la ciudad...era muy tortuosa para mí. - dijo cabizbaja.
- Bien...ya veo..bueno si es lo que deseas hacer, será un placer trabajar contigo.
- Lo dices en serio? Así sin más detalles?.
- Nos conocemos de la preparatoria!, no se hable más, puedes comenzar hoy, Nadia la recepcionista te dará todos los detalles y tendrás tu propia oficina, nos vemos en una hora, te parece?
- Siii, grandioso, gracias por la oportunidad...señor Larsson.
- Por favor solo Phillip.- dijo sonriente.

Fue un primer día muy extenuante pero se sentía satisfecha de haber solicitado ese puesto, que sorpresa encontrar a su amigo de la preparatoria ya realizado en su profesión, y ella aún se sentía como desorientada en cual era su lugar. Esperaba que este trabajo fuera lo que necesitaba para sacarse gradualmente a Kyle de su mente y su corazón.

Ya a casi un mes de haber comenzado con Phillip el nuevo empleo le dejaba poco tiempo para la vida personal, la cual era nula, solo un almuerzo cada fin de semana de por medio con Tracey y Thomas y la pequeña, y el siguiente con Lisseth y su familia.

- Aylín puedes venir un momento?- llamó por teléfono.
- Si, enseguida voy.

Tocó a la puerta como de costumbre, se encontró con su nuevo jefe tapado de carpetas las cuales iba acomodando a un costado.
-¿Qué haces?- dijo curiosa.
- Estoy tratando de encontrar un caso que fue archivado hace tiempo, pero no logro encontrarlo.
- Te ayudo, de seguro debe estar donde menos lo esperes.
- No, dejalo, te llamé para invitarte a cenar esta noche...si quieres obvio, si no tienes otro compromiso...
- Ohh claro que sí, no te preocupes no tengo otros planes.
- Genial, entonces!!! Paso por tí a las ocho?
- Si..gracias!!!, ahora sí dejame ayudarte con todo esto, dijo burlona.

Desde que Aylín comenzó en su nuevo trabajo, la confianza que tenía con Phillip era muy buena, se sentía muy cómoda en ese lugar, no podía pedír más, solo agradecer la suerte que tuvo al caer en un buen trabajo con compañeros muy amenos.

Esa noche Phillip pasó por Aylin como habían quedado, ella lucía un vestido negro que delineaba su figura.
Phillip al verla, dejó volar su imaginación hacia aquellos años de preparatoria donde conoció a una chica muy corta de genio que usaba enormes gafas, en nada se parecía ahora, se había transformado en una joven muy esbelta y bella, tenía la ilusión de acortar distancias con ella, aunque nada de eso le insinuó hasta el momento, iría lento.

- ¿Cómo estás jefe?- preguntó burlona.
- No mejor que tú, mi querida!

Ese comentario desconcertó a Aylin y la puso en guardia, no quería inmiscuirse con nadie, no podía sacar de su mente a Kyle, cada vez le costaba mucho más, pero también es cierto que podía ser parte de su imaginación.

- Adonde iremos?- dijo curiosa.
- Ahhh es una sorpresa!
- Bien, no preguntaré más entonces!!

Ya en el lugar, un restaurant de lo más llamativo, alejado de la ciudad, con luces tenues que hacían del mismo algo muy tranquilo e íntimo.

- Qué hermoso lugar!!!- dijo asombrada.
- Sabía que te gustaría, tiene la mejor comida que hayas probado.
- Tan así??
-Lo comprobarás por ti misma.

Después de haber pedido la cena, ambos comenzaron a comer tranquilamente mientras surgía la charla sobre sus vidas, Aylin estaba reacia a contar lo sucedido con Kyle, no se sentía fuerte emocionalmente para recordarlo.

- Y bien, que opinas?, que te pareció el lugar y la comida?
- En verdad me encantó, se respira paz, tranquilidad, hay buena música, un diez sería para mi.

Phillip al verla tan emocionada se sintió feliz, era un avance, al cual seguiría la historia de su vida.