ocho

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La sonrisa en mi rostro era evidente, no podía evitar sentir la felicidad recorrer mi cuerpo al recordar la tarde que había pasado con Kevin.

Claro que sentí la mirada curiosa de mi padre sobre mi, y cuando pregunto, me limité a responder que estaba feliz de regresar a México y conocer este nuevo estado.

¿Que si me creyó?

No lo sé, pero no volvió a preguntar así que supongo que si lo hizo, y ahora, habíamos vuelto a la casa para tomar un baño y partir a CDMX con mi madre.

Todavía seguía en duda de lo que haría estos meses, pero; honestamente mi mente seguía enfocada en aquellos ojos cafés que me volteaban el mundo al revés, y estaría dispuesta a tomar la decisión que fuera con tal de seguir viéndolo a el.

—Llegamos, Anna.— mi padre anunció.

Yo asentí y abrí la puerta para bajarme y entrar a la casa directamente a bañarme.

—Nos vamos en dos horas.— fue lo ultimo que escuché antes de correr escaleras arriba.

Llegue al baño, me despojé de mi ropa y tome mi celular para poner algo de música mientras me bañaba, luego, entre a la regadera y disfrute de un largo baño caliente.

20 minutos después salí envuelta en una toalla, volví a agarrar mi celular con la esperanza de tener algún mensaje del futbolista, sin embargo no había nada.

Resignada suspire y continúe con mi rutina normal hasta que estuve cambiada y peinada nuevamente.

Aún faltaban 40 minutos para salir de la casa así que aliste mi mochila y luego me tire en la cama a perder tiempo en lo que la hora llegaba.

Desbloquee mi celular y deslice por Instagram, vi unas cuántas fotos hasta que apareció una foto de Luis Chávez en mi Feed.

Indecisa pique en su perfil y comencé a revisarlo, no mentiría, el era muy atractivo, sus ojos eran también cautivantes, pero no causaban el mismo efecto que Kevin Álvarez causaba en mi.

No quería ser grosera, me parecía algo maleducado de mi parte no responder, pero no quería que Kevin pensara mal de mi, aunque...

Probable de Luis sólo esté siendo amable, ¿no?

Mordí indecisamente mi labio y decidí dar click en el apartado de mensajes, abriendo así el chat dejándome ver el mensaje que había mandado minutos después.

Lch24
Hola Anna, cómo estás?

Anna.alm
Hola Luis, bien bien y tu?

Luego de responder aquel mensaje, inmediatamente sentí la culpa invadirme, aún sabiendo que no hice nada malo, no podía evitar sentirme mal.

Pasaron unos 10 minutos en los que yo seguí perdiendo tiempo, cuando su respuesta llegó.

Lch24
me alegro yo bien también
oye, quieres salir un rato hoy?
A que conozcas Pachuca jaja

Mierda, mierda, mierda, dudaba que siguiera siendo solo amistoso su intención de hablarme.

Anna.alm
Ay, voy en camino a cdmx
No puedo, perdón :(

Menos mal que era cierto, aunque quisiera, (que no quería) no hubiera podido así que le agradecí a dios por tener una excusa verdadera.

Por otra parte, seguía un poco extrañada de que Kevin no me hubiera mandando mensaje, tal ves estaba siendo paranoica, pero, realmente me decepcionaba un poco que no me hubiera preguntado ni si llegue a casa bien.

Pero bueno, tal vez solo eran exageraciones mías y ya, pensé en enviarle yo mensaje, pero, justamente en ese momento tocaron a mi puerta dándome a entender que ya era de tomar carretera.

Suspire derrotada y luego tome mi mochila para salir de casa y dormirme todo el camino.

Mi padre ya estaba adentro, me subí y de inmediato el auto comenzó a andar mientras que yo buscaba mis AirPods en mi mochila para poner algo de música.

Una vez que los encontré me los puse y abrí una playlist tranquila para arrullarme, luego, cuando la tuve, entre una vez más a Instagram esperando ver un mensaje de Kevin, sin embargo, lo único que vi fue la respuesta de Luis a mi mensaje anterior

Lch24
Oh ntp ntp
Ya luego será :)
q tengas un buen viaje linda

Y con el pensamiento en la palabra "linda" me dormí.

________________        K        ___________________

Luego de que Anna se fuera no pude dejar de pensar en ella ni un solo instante.

Realmente creí que luego de besarla el capricho pasaría y podría volver a vivir mi vida como normalmente era, sin embargo, parecía que las cosas habían empeorado pues ahora lo único que estaba en mi mente era ella.

Ella y sus preciosos y brillantes ojos marrones, su pequeña nariz de bolita y el rosado de sus labios.

No podía dejar de sentí la suavidad de su piel contra la mía, su dulce olor a flores tampoco me abandonaba, todo de ella me parecía fascinante, tenía algo que me cautivaba y encendía partes de mi que ni yo sabía que existían.

Definitivamente era maravillosa.

Seguí manejando rumbo a mi departamento, llegue unos minutos después y me baje para irme directo al baño a tomar otra ducha y descansar todo el día.

Busque las llaves, abrí y subí las escaleras rápidamente cuando de pronto algo hizo que brincara del susto.

—Hola bebé!.— me gritaron y brincaron encima ocasionando que diera unos pasos hacia atrás.

—Nailea, ¿que haces aquí?.— pregunté extrañado.

Nailea Vidrio

Mi ex novia, nos conocimos porque jugábamos los dos para los Tuzos, pero, ella se fue al Cruz Azul y la distancia y los problemas pudieron más que nuestro noviazgo.

Sin embargo nosotros, mmm, como podría explicarlo.

Nosotros manteníamos una relación un tanto complicada, si bien, por el bien de los dos habíamos decidido terminar, había cosas que aún no quedaban muy claras entre los dos.

Como lo eran estas visitas de sorpresa que nos hacíamos de vez en cuando, pero, ahora realmente me tomo desprevenido.

Así como me tomo desprevenido el momento en el que nos comenzamos a besar, luego, cuando nos deshicimos de nuestra ropa, cuando el ambiente comenzó a calentarse y terminamos haciendo lo mejor que sabíamos hacer.

Sexo

Y luego me pregunté, ¿en que estaba pensando antes?

Y luego me pregunté, ¿en que estaba pensando antes?

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yo team Luisito 👀

No me culpes 𝐊𝐞𝐯𝐢𝐧 𝐀𝐥𝐯𝐚𝐫𝐞𝐳 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora