Alma encadenada a la sangre

II. Sueños de tiempos lejanos

'... A-Yuan'

"A-Yuan" Llamó una voz.

Envuelto en tinieblas, Lan SiZhui se vio inmerso en un sueño intrigante. La oscuridad no fue siniestra, sino cálida; como yacer bajo la sombra de un árbol en un día soleado. Pudo sentir el calor calentarle el cuerpo, el olor a hierba mojada y madera en el aire.

Captó el sonido de una risa, y la misma le recordó el tintineo de una campana de viento. Fue natural, reconfortante. Por alguna razón, resultó familiar. Supuso que se trató de la voz de alguien que conoció alguna vez.

La música le envolvió, sin embargo, la melodía desaparecía de sus memorias imposibilitando su réplica. Sintió el agarre firme sobre su cuerpo. Reconociendo que su cuerpo era más pequeño, similar a un bebe. Un bebe al que se le cargó y sostuvo con cuidado.

En la oscuridad, inmerso en una niebla densa y confusa, pudo escuchar barullo de personas; charlando y riendo.

Nada le resultó familiar.

La persona que ríe en sus sueños habló, pero SiZhui no logró entenderle.

Algo se aclaró en sus ojos, y frente a él se hizo un hombre. El hombre al que había perseguido en sueños durante años.

A diferencia de otras noches, experimentó un sueño feliz, al menos aparento ser feliz.

SiZhui se vio golpeado por la nostalgia al sentir a esa persona juntar sus frentes, mientras sonreía contra sus mejillas.

'¿Quién es?', no pudo evitar preguntar.

¿Por qué apareces en mis sueños?

Lan Yuan reconoció la opresión pero no fue aterrador. Nadie le había abrazado en mucho mucho tiempo. Cree que Hanguang-Jun le abrazó alguna vez, pero le resultaba difícil saberlo. Hanguang-Jun no disfrutó de tocar a otros, por lo que probablemente SiZhui lo imaginó.

¿Por qué querría abrazarlo?

La gentil voz llamó a su nombre una y otra vez. Le llamó 'A-Yuan'

No SiZhui, no Lan Yuan.

Siempre fue A-Yuan. Esto a su vez le llevó a pensar que se trataba de algún familiar, alguien que le cuidó antes de ser rescatado por Hanguang-Jun. Algún hermano, o padre. Se le llamo de manera protectora como una madre a un niño.

El sueño se tornó oscuro, al punto en que fue incapaz de ver el rostro del hombre. No fue inusual el olvidar las apariencias en cuestión de minutos. Lo que a su vez fue lamentable. Giró, y se le hizo rebotar. Sintió la sensación de tierra húmeda, fría contra su piel hasta el punto de la incomodidad.

Cuando la voz se convirtió en un eco lejano, Lan SiZhui que había recuperado su cuerpo comienza a correr, sin embargo no estuvo más cerca de aquella voz, y el camino no cambió, no se acortó. Permaneció.

Incapaz de soportar el esfuerzo extenuante, SiZhui cayó sobre sus rodillas, y se sofocó. Impotente como un niño perdido, contuvo lágrimas de frustración. La figura debió tenerle lastima, pues giró en su dirección con una sonrisa genuina,y al buscar su rostro, SiZhui fue cegado por la luz del sol sobre su cabeza.

Las facciones del hombre se aclararon haciendo imposible reconocerle. Y sin embargo, llamó su nombre una última vez.

'A-Yuan'

***

SiZhui abrió los ojos.

Su sueño había terminado y con esto un sin fin de preguntas sin respuesta. Estaba empapado con sudor frío y su respiración agitada resonó en sus oídos, como cada noche en que los sueños le acosaban.