Luego de los acontecimientos de Alice in Borderland, T/n tratará de volver a su vida normal. Sin embargo, será difícil para la chica ya que el tener alucinaciones de su hermana fallecida y tener sueños extraños hará que no sea fácil para ella.
...
- Estábamos muy preocupadas, no pudimos visitarte porque teníamos mucho trabajo - mencionó Ino con una pequeña sonrisa nerviosa.
Yo sólo levanté el pulgar para hacerles saber que estaba bien, ellas saben que entiendo cuando me hablan aunque ahora esté sorda.
No quería estar mucho con ellas, tenía que volver a trabajar y no quería perder el tiempo.
Estaba por ir a mi lugar hasta que vi que había un chico bastante perdido, tenía el pelo negro un poco largo y desalineado.
Era alto,delgado y parecía como si fuera la primera vez trabajando en un lugar.
Vi como el jefe se acercaba a él mostrando simpatía para luego apuntar hacia mi zona, supongo que trabajará al lado mío, va a ser una molestia.
Se acercó y me saludó con una reverencia de casi 90 grados, no me moví de mi asiento y también lo saludé con una reverencia.
Se quedó quieto sin hacer o decir nada, me lo quedé mirando un poco confundida hasta que dijo: - Me llamo Ryohei Arisu, el jefe me dijo que usted me enseñaría lo que tengo que hacer - mencionó.
Voltee mi mirada hacia el jefe que estaba parado viéndonos con una sonrisa, le mandé una mirada asesina y luego volví a ver a Arisu.
De algún lugar me sonaba hasta que mi cerebro inconscientemente borró de su cara el marcador todo rallado de mi sueño, así que él también estaba ahí.
No estaba entendiendo nada de lo que sucedía en mi inconsciente.
Agarré una libreta y con una lapicera azul empecé a escribir para luego mostrarle al chico.
'Soy Sorda.'
Arisu se me quedó viendo un poco asustado y avergonzado para luego disculparse enseguida e ir hacia otra persona y preguntarle a otra persona lo que tenía que hacer, como todo un novato.
No sé qué clase de broma me estaba haciendo el jefe pero no era gracioso.
En la hora de almuerzo me quedé esperando a que mi almuerzo terminara de calentarse en el microondas hasta que sentí cómo alguien me tocaba el hombro dos veces, al voltearme vi que era el chico novato de antes y que traía una libreta con algo escrito.
'Lamento lo de hace unas horas, no estaba informado sobre eso. Te pido mis más sinceras disculpas.'
Me pareció un poco tierno de su parte y me dio gracia, con la misma libreta agarré mi lapicera y le escribí: 'Descuida. Por cierto, puedo leer los labios.'
- Eso facilita las cosas - dijo mostrando una pequeña sonrisa. - ¿Puedo saber tu nombre?
'T/N T/A' escribí en la libreta.
- Un gusto - contestó el chico haciendo otra reverencia.
Le copié y luego seguí con lo mío, era un novato pero bastante agradable y respetuoso. Seguro era bastante joven, unos 19 o 20 años.
Era viernes por la noche, pasó una semana luego de salir del hospital, a veces volvían esos sueños extraños pero eran muy cortos, sólo mostraban escombros de la ciudad y gente muriendo, era bastante macabro.
Hoy como todos los viernes venía mi hermana y comíamos pollo frito juntas, aún no lo pedí pero la tradición era que venía y hacíamos la comida juntas agregando unos snacks y decoraciones.
Lo único que hacía antes era poner los vasos en la mesa y unas velas.
Mientras ponía todo mi cerebro hizo como un click y recordé que ella no seguía viva, por un momento lo olvidé e hizo que el hueco que tenía en el pecho volviera.
Me sentí una estúpida por aún no superarlo.
Algo que no te dicen del luto es que no sanas con el tiempo, eso es una mentira que te dicen los que no lo experimentaron.
Es algo con lo que aprendes a vivir con el tiempo y aún no llegué a esa parte.
Me sigue doliendo horrores y lo único que hago es tratar de ocultarlo porque de alguna forma tengo que seguir con mi vida, no sé cómo pero tengo que hacerlo.
No me puedo permitir parar para "sanar".
Me fui del apartamento, tenía que salir y refrescarme un poco, no me estaba sintiendo bien.
Por suerte el cementerio donde está mi hermana estaba cerca, hacía bastante frío así que agarré un abrigo beige y una bufanda blanca.
No habían muchas personas en la calle, estaba oscuro y un poco nublado, por lo menos las luces hacían que el ambiente se sienta más lindo.
Al llegar al cementerio me quedé estática enfrente de la tumba de mi hermana que estaba al lado de otras más.
"Shun Hanako 2001 - 2020"
Aún no podía asimilarlo, iba a ir a la universidad.
Aparte en muy pocos días iba a ser su cumpleaños.
Debería estar estudiando ahora para su futuro.
Ella dijo que le gustaría viajar por el mundo y poder encontrar a alguien que la amara por la eternidad.
No merecía este final, no ella.
De las dos yo merecía morir, su positivismo y alegría sería mejor para este mundo.
Era alguien tan increíble y que le arrebaten la vida de esta forma era muy injusto, desearía que haya sido al revés.
Me quedé llorando en silencio, no quería que nadie me viera débil...
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