Swiftie moment

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La noche transcurrió de forma rápida, Luzu se llevó terminando increíblemente bien con la familia de Quackity, Beni y Cochi se la pasaban encelando a su primo diciéndole "bonito" a Luzu y Titi estaba encantado con el nuevo chico que había conocido después de saber que él le dio aquellas margaritas.

-Bueno, yo ya me tengo que ir, ha sido un placer conocerlos a todos ustedes, les agradezco la comida, y Quacks...gracias por invitarme.-Luzu se levantó de la mesa despidiéndose de todos para luego caminar hacia la puerta y salir.

-¡Luzuu!, gracias por venir, de verdad que tu compañía me cayó con madre.-Quackity lo seguió hasta afuera del departamento para despedirse de él.

-No te preocupes Quacks, siempre que me necesites, aquí estaré.

-Y...de nuevo, gracias por las flores, a Titi le encantaron tanto como a mi.

Luzu notaba un pequeño sonrojo en el menor, le resultaba demasiado tierno, hacía que sus ojos y aquellos lunares resaltaran un poco más.

-Fue lo mínimo que les pude traer, me da mucha alegría que les hayan gustado tanto.

Las miradas entre Luzu y Quackity eran fijas, el contacto visual entre ambos no se rompía, ¿y lo mejor?, que no les incomodaba. Inconscientemente Luzu se fue acercando a Quackity y Quackity a Luzu, el castaño de mayor edad colocó una de sus manos en el rostro que para él, era el más precioso que había presenciado, lo fue acercando poco a poco hasta que sus narices estaban tan juntas que podían sentir las respiraciones del uno y el otro, Quackity sentía que se desvanecía, sus piernas temblaban de los nervios, lo iba a besar, y lo haría en ese momento, lo deseaba tanto que...

-¡EH WEY!, TITI  SE DIÓ EN LA MADRE, ¿DONDE ESTÁ-.....-Beni salió del departamento gritándole a Quackity para que regresara con ellos, hasta que vió la escena que interrumpió.-Verga, perdón, no me había dado cuenta de que pues...ustedes...ps...se iban a besuquear...lo siento carnal.-Beni de los nervios cerró la puerta tan fuerte que hasta Luzu escuchó el regaño de Spreen hacia Beni por eso.

-Yo...m-me tengo que ir Quacks, me dio demasiado gusto verte y...espero podamos vernos pronto de nuevo.

-S-si, claro, ¡cuando quieras!.

Se estaban cagando de nervio, Luzu aún no se quería ir pero si no lo hacía se desmayaría. Ambos se despidieron por fin y cada quien fue por su camino.

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