"¿Cómo hago que quieres quedarte? por favor deja de mirarme con esos ojos, él nunca será como tú".
-Contenido explicito.
-Hetero.
-Taehyung
-Jungkook
-Jaewook
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Eh...
Te quedaste sin palabras porque no sabías que decirle.
—Supongo que te perdiste, lo entiendo. Después de todo el edificio es algo grande— dijo de forma muy amable.
—No en realidad no.
Su semblante cambió a uno confundido pero sin quitar la mirada de tus ojos.
—Es una larga historia.
—Puedes contarmela en el camino— ladeó la cabeza para mirar hacia la entrada—vamos.
—Escucha Tae— lo detuviste de la muñeca— no pagué para acostarme contigo. Solo estoy esperando a mis amigas.
—Oh— giró de nuevo hacia a ti.
De nuevo la señora que al parecer era la dueña del lugar, apareció ante ustedes.
—¿Qué pasa linda, quieres a otro? ¿Este no te gustó?— preguntó divertida y solo viste al chico encogerse de hombros.
—No, no es eso.
Supiste que la señora no los dejaría en paz y notaste el tic nervioso del chico mientras se rascaba las comisuras de las uñas.
Y solo por esa simple razón, decidiste cambiar de opinión. Recordaste cuando él también se pellizcaba las comisuras.
—¿Puedo llevármelo a otro lugar?— sujetaste su mano y él envolvió la tuya con sus largos y finos dedos.
No entendiste por qué el corazón se te aceleró, le habías sujetado la mano a otros chicos, esta no era la primera vez.
—Pagaste por un servicio completo. Técnicamente nadie puede salir de aquí pero haré la excepción contigo. Deben volver antes de tiempo— respondió no muy segura y miró al hombre a tu lado—Más te vale volver a tiempo niño, recuerda que hoy la señora Kang viene.
—Pero hay muchos. ¿No puedes darle a otro?
—Sabes que la señora Kang solo viene aquí por ti. Así que no la hagas enojar.
Asintió sin más e hizo una reverencia en cuánto —"Esther"— la dueña del lugar se dió la vuelta y caminó hacia adentro.
El silencio se hizo presente y ambos se miraron, soltaste la mano de Tae de inmediato y te diste el tiempo de analizar la gran ventaja de estatura que te llevaba.
—Puedo explicarte— aclaraste— sé que esto sonará muy extraño y esta bien si no quieres pero ¿quieres ir por algo? ¿helado? ¿jugo? ¿Café?
Sus mejillas se abultaron y te regaló una tierna sonrisa sin enseñar los dientes— conozco un lugar donde preparan jugos frescos, esta a tres calles de aquí ¿te parece bien?
Asentiste un poco nerviosa—¿no tienes hambre?— de nuevo observaste tu reloj.
Negó— solo un poco pero la hora de la cena es hasta que todos terminemos de trabajar.
