Secretario 24/7 [KOOKMIN]

19

Los días transcurrieron rápidamente, aunque no para todos, esa semana fue eterna para Min Soo, él no se separó de Yuna en ningún momento; aunque sus hijos insistieron en que él fuera a casa a descansar, Min Soo se mantuvo firme con que quería quedarse a su lado.

el alfa le rogaba a la diosa luna que salvará a su omega y a sus pequeños, durante horas lloró rogando a la diosa por un milagro; Yuna a pesar de que su cirugía salió bien y que obtuvo las transfusiones de sangre necesarias, su estado de salud era reservado al igual que el de sus cachorros.

la culpa agobiaba a Min Soo, nuevamente aquellos pensamientos de un mundo sin su omega y cachorros le atormentaba; cuando el cansancio lo venció y sin quererlo se quedó dormido, Yuna despertó horas después de que el alfa se quedara dormido, la luz cegadora sobre su cabeza y las paredes blancas le hicieron sentirse desorientada, miró a su alrededor y poco después su mirada cayó sobre la persona a su lado.

ella miraba a su esposo dormir en una posición incómoda, al principio sintió mucha rabia ya que ella recordó que Min Soo la había golpeado, pero ese enojo no duró mucho, Min Soo se removió en su lugar dejando ver las marcas de las lágrimas en su rostro; a ella se le derritió su corazón al ver al alfa así, Yuna nunca lo había visto en ese estado, ni siquiera cuando aquella omega se fue de su lado, el lobo de Min Soo estaba triste al igual que el de ella.

en el corto tiempo que tiene de estar unida a él fue aprendiendo la manera de llevarse con el alfa; debido al abandono de su primera omega él se comportaba como un lobo rabioso, insensible, prepotente, él había tomado esa postura para no volver a ser víctima de un mal amor, el alfa guardaba un secreto en lo más profundo de su corazón y la única que lo sabía era Yuna.

por ese secreto Min Soo tuvo que ser el alfa malvado que sus hijos creían que era, él no quería que sus hijos odiaran a su madre, por lo que decidió ser el malo de la historia, él podía manejarlo, después de todo aceptaba que en parte había sido el culpable de que ella lo abandonara, Min Soo pasaba solo en el trabajo, tratando de hacer fortuna para su manada, sus hijos y su omega eran lo más importante por lo que se esforzó trabajando día y noche, el pasar tantos años así finalmente hicieron que ella buscara en otros brazos lo que no obtenía en casa.

cuando ella los abandono sus hijos se pusieron en su contra, mas Taeyang, todo su rencor fue hacia su padre, él presencio una de las tantas peleas que tenían, en esa ocasión Min Soo la golpeo, era la primera vez que le levantaba la mano a su esposa, él había perdido la razón en ese momento por la rabia que tenía de haber sido traicionado por ella; claro que eso sus hijos nunca lo supieron, esa fue la última vez que la vieron, un año después conoció a Yuna, ella era agua fresca para él, su vitalidad lo contagio y sin proponérselo empezaron a tener encuentros ocasionales.

Min Soo se sentía vivo otra vez, feliz al lado de Yuna; cuando la reclamó, él la presento poco después como su esposa, Taeyang enfureció porque no quería que nadie tomara el lugar que le correspondía por derecho a su madre.

sus hijos nunca supieron lo que paso esa noche en la que él había reclamado a Yuna, esa noche él estaba solo en la mansión aullándole a la luna, el dolor por un lazo roto quemaba su pecho, la madre de sus hijos fue reclamada por otro alfa; para ese momento  Yuna y él tenían una gran conexión por lo que ella sintió el llamado de su alfa y fue hasta la mansión, él sufría en ese momento y ella entendió lo que pasaba, ella también compartía el sentimiento de ser abandonada por su pareja, ella calmo su corazón herido y él la tomó esa noche para después unirse con ella por sangre. 

volviendo al presente, el dolor en su vientre persistía, pero era leve y se hizo a la idea de que su bebé ya no existía, Yuna acaricio su vientre mientras lloraba, ella estaba ilusionada de darle un cachorro a su esposo, sabía lo mucho que él lo deseaba.

cuando ella se enteró de su embarazo empezó a preparar algo especial para el alfa y darle la noticia, solo quería ir primero con el médico para que le confirmara su estado, pero al final no pudo hacerlo porque estaba esperando a Taeyang y a Jimin , Min Soo amenazaba con reemplazar a Jimin y sabía que su hijastro Jungkook moriría de dolor por ello, ese día Yuna vio a aquel alfa dolido y rabioso nuevamente, lo que le pasaba a su hijo de alguna manera desenterró recuerdos dolorosos.

Ella acarició los cabellos de Min Soo para despertarlo, cuando él levantó la mirada se veía mal, sus ojos estaban hinchados de tanto llorar, su esposo siempre mantenía una apariencia perfecta aun en las peores situaciones, pero ahora verlo destrozado le conmovió.

_ mi amor gracias a la diosa. - dijo Min Soo sollozando mientras presionaba el botón de emergencia.

_Min Soo, nuestro bebé está muerto. - sollozo Yuna sintiéndose morir por ello.

_no mi amor, nuestros hijos están vivos, los tres están vivos. - dijo viendo sus ojos llenarse de lágrimas nuevamente.

_gracias a la diosa. - dijo aferrándose a él.

_ Yuna mi amor perdóname, por ser un completo imbécil contigo, no fue mi intención que esto sucediera, prometo ante la diosa que cambiaré por ti y por nuestros hijos, no quiero que te vayas de mi lado. - dijo besando sus manos, él temía que Yuna se apartará de su lado al igual que lo hizo su primera esposa.

la promesa de un alfa ante la diosa era ley, si ellos rompían esa promesa serian condenados por la eternidad a la soledad, el linaje de un alfa es algo muy importante.

horas después el doctor terminó de revisar a Yuna y afortunadamente para ella y los bebés su recuperación estaba siendo más rápida de lo que habían estimado, solo la lesión de su columna tardaría un poco más, pero eso sería superado con terapia indicó el doctor, ella empezaba a tener sensibilidad en sus piernas y eso era algo muy bueno.

mientras tanto en la mansión Jeon, Jimin recién despertaba, la calidez bajo él era agradable y el aroma suave a vainilla mezclada con la canela era confortante, los brazos de Jungkook le rodeaban, ambos habían pasado varios días juntos, el celo tras la marca se extendió unos días más de los tres días que regularmente duraba; un beso en la mejilla de Jungkook fue dejado haciéndole despertar.

él le sonrió a Jimin para luego tomar lentamente sus labios, siendo apresado por su cuerpo y lentamente se metió entre sus piernas, Jimin jadeo al sentir sus labios en sus pezones, ellos estaban muy sensibles por que horas antes el alfa había estado jugando con ellos.

_tan dulce, amo todo de ti. - susurro hundiéndose lentamente en él.

_alfa... ¡aaah!

Jungkook nuevamente arremetía con entusiasmo su entrada, él pareciera estar en celo todavía, los movimientos del alfa eran rápidos y precisos al dar en su punto dulce una y otra vez, buscando con desesperación su orgasmo.

Minutos después salió de él lentamente, le dio la vuelta dejando su pecho contra el colchón y volvió a penetrarlo lentamente, Jimin se deshacía en gemidos ante el golpe a su punto dulce, ellos estaban a ese punto tan excitados que el cansancio en sus cuerpos fue ignorado; Jungkook arremetía su punto dulce vigorosamente, dos fuertes estocadas dieron por terminado el acto haciendo que ambos llegarán juntos al orgasmo.

El alfa dejó su esencia dentro de él, mientras que Jimin poco a poco se fue quedando dormido, no resistió más por lo exhausto que se encontraba, Jungkook salió de él y lo abrazo acariciando su vientre, él estaba ansioso de traer a un cachorro al mundo, era su sueño el verse rodeado de su propia manada.

***

lamento mucho que ayer no publique nada, fue un día muy feo en el trabajo, 

eso me dejo bloqueada por la preocupación del momento y no quise escribir nada.