𝟏: 𝒖𝒏 𝒄𝒐𝒎𝒊𝒆𝒏𝒛𝒐

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—¿¡Porqué lo rescataron!?— Se oye una voz lejana, una bastante asustada. — Por poco salimos heridos...

—Querrás decir que tú casi saliste herido.

— ¿Estará bien?

—Está bien, sus signos vitales yacen estables... No puedo pensar en la clase de infierno en la que ha pasado...

—Ciertamente... Él...

—Oh, oigo un ruido... — Dice una voz masculina, su voz se siente más cerca. El hombre mira a sus compañeros que están en silencio, hasta que voltea a su lado —¡Está despertando!

—¡¿De verdad?! Oye chico, ¿estás bien?

—Ahh me encantaría que Nami-swan se preocupe así por mi...

¿Nami? — Murmura el despertado, ve lo poco que puede, siente una lana sin esquilar cubriéndole toda la cara.

Yo... Estaba...

—Por favor, el paciente debe estar tranquilo...

Esa voz... La he oído — Sus ojos suben hasta ver un tronco pequeño cubierto de pelaje, unos brazos pequeños y pezuñas por manos — he visto esas pezuñas — su mirada asciende hasta llegar su cabeza, notando esos cuernos siendo adornados con un sombrero rosa. Lentamente el paciente cae en cuenta en donde está, y, con una rapidez asombrosa, agarra el brazo del extraño animal al tanto que el susodicho grita del pavor.

¡¿EL RENO!?  — Grita por dentro, mientras se sienta para poder verlo mejor.

¡ack, mi espalda!

—Oi oi— amenaza uno— no te pases de listo con la persona que te salvó la vida mocoso —blande una espada y la apunta directamente hacia el rostro del enfermo chico, éste observa el cabello verde musgo del hombre y sus tres espadas.

¡EL ESPADACHÍN! — Voltea a todos lados, pensando lo irreal de la situación, un hombre rubio vestido de negro, una mujer de cabello anaranjado, un tipo de nariz larga y cabello afro, y un chico con sombrero se paja de sonrisa alegre.

Frente a él está nada más y nada menos que la tripulación de sombrero de paja.

¿Estaba durmiendo? — Se dice — ¿Todo lo que vió, vivió y sintió era un sueño? ¿O era un sueño vívido en el que era otra persona como una visión a un futuro incierto?

Nunca los había conocido en persona, ni siquiera sabía en dónde estaba, pero sabía quienes eran.

—¿Estás bien, chico?— pregunta una mujer, el paciente nota los preciosos ojos azules de la alta mujer.

Asombrosamente, su poca vista no impide ver hasta los poros de la bella mujer.

Hoy la locura se ha lucido...

¿Realmente estoy despierto?  — Se pregunta pellizcando su mejilla, sin creer que los recuerdos de toda una vida no eran nada más que un sueño extendido —. ¿No era un producto de su imaginación?

¿No había vivido en esa casa de color blanca como toda la vida?

¿No estuvo estudiando y terminado el colegio en el que estuvo su madre?

¿Todas las cosas que tocó, vió, comió y sintió los imaginó?

¿Las aventuras que vió de la tripulación presente en la televisión no ocurrieron?

Pero, parece que ellos sí existen, y hacen lo mismo que en la televisión.

Y si no se equivoca, debe de estar en el antiguo barco que usaban; el Merry (debe de estarlo, ya que no está el Cyborg ni el esqueleto) significa que, han pasado días desde Arabasta.

𝕆𝕁𝕆𝕊 𝕀ℕℂ𝔸ℕ𝔻𝔼ℂ𝔼ℕ𝕋𝔼𝕊 || 𝒐𝒏𝒆 𝒑𝒊𝒆𝒄𝒆 ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora