𝟏𝟏: 𝒍𝒖𝒏𝒂𝒓𝒊𝒂

114 22 2
                                    

Dedicado a Mitsuk07 que siempre vota cuando actualizo.

Gracias :)

Tuvo la suerte de que pudiera propulsar sus aleteos hacia el barco de los revolucionarios, puesto que sus plumas ya débiles sucumbieron ante el viento

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Tuvo la suerte de que pudiera propulsar sus aleteos hacia el barco de los revolucionarios, puesto que sus plumas ya débiles sucumbieron ante el viento. Y cayendo a la cubierta nota que el acelerado crecimiento de sus alas hizo que su espalda sufriera heridas, dejando su ropa cubierta de su sangre

— No me toquen — exclama aún en el suelo, temerosa de que algunos de los presentes se expongan a su veneno. Sus ojos caen en koala, que ya está sufriendo por el contacto de su sangre y rápidamente va hacia ella gateando, a darle el antídoto.

Koala siente como su cuerpo queda paralizado, seguido de un dolor indescriptible en su interior y sus latidos lentamente descienden. En segundos, percibe una presión en su boca y el malestar poco a poco se dispersa, hasta abrir los ojos. Se encuentra cara a cara con Luscinda, y a su espalda yacen Sabo y Dragon que quedan estupefactos viendo las alas desplumadas.

Luscinda se levanta, sintiendo cada vez más debilidad.

— me siento como la... — y los presentes ven cómo una llama pequeña crece en su espalda, y se vuelve una incandescencia que la envuelve para consternación del ejército.

— ¡AHHHH SE ESTÁ QUEMANDO! — Grita Koala, Sabo se apresura a traer una cuba de agua. Dragon, con calma les pide que dejen de hacer ruido.

Luscinda se aterroriza al percibir las llamas esparciéndose en su cuerpo, pero más que ardor o quemaduras, siente una gran vitalidad.

Escuchando los murmullos de los tripulantes, Luscinda se mira las manos y  brazos e inhala con lentitud. Sus cicatrices aún siguen en su cuerpo.

— Supongo que las heridas sufridas antes del florecimiento no se pueden curar. — Sentía las miradas de todos los revolucionarios del barco, algunos con miedo, otros, con una gran curiosidad... unos de ellos es Dragon, no se le ve el miedo en sus ojos.

Esas emociones en sus rostros le recordaban aquel día en que unos piratas, amigos de su madre fueron a visitarla... debido a la sorpresa que su padre iba a visitarla ella alzó las alas... siendo vistas por aquellos extraños, incluso uno de ellos la llamó "Tengu".

Fue la primera y única vez que vió a su madre tan desesperada y temerosa de perderla.

Le hizo prometer no revelarle sus alas a nadie.

El miedo de que su hija fuese un conejillo de indias al igual que ella es algo que trauma a cualquier madre.

Sabiendo que Luscinda tuvo un florecimiento muy tardía, Dragon la envía a una habitación a descansar.

Ya estando tranquilos, se realiza una reunión entre los comandantes del ejército y los cadetes de confianza de Garp en el barco de los revolucionarios. Dragon y Garp hablaban como si se conocieran de toda la vida para sorpresa de todos, y Sabo, prestando atención, nota a un chico de cabello rosa que no está pendiente de la reunión, y cuando abre la boca éste pregunta si Linda está bien.

Ahí supo que el nombre de la alada era Luscinda "Hellhound", una conocida asesina de marinos que fue reclutada por el mismo Garp.

—¿Qué necesita el vicealmirante de nosotros? — Pregunta Dragon.

— Has visto su origen — responde Garp —: es una lunaria, una hija de una prófuga que también fue parte de esa tribu.

— Al parecer la conoces bien...

—La vi en su niñez, fuí a esa isla donde estaban sus padres, ellos tenían miedo de apresarlos... pero no lo hice.

—¿porqué? — Pregunta Sabo. Si ella era la persona buscada por Garp, ¿porqué hizo la vista gorda?

—me mandaron a buscar una prófuga, no a una madre.— responde el vicealmirante. Sabo se asombra ante la respuesta, y crece en su interior un respeto al héroe de la marina. — Oye tú mocoso, me pareces conocido — cuestiona el hombre al rubio — creo te he visto antes.

—Nunca lo he conocido personalmente en mi vida —responde Sabo.

—Lo rescatamos en el reino de goa— dice Dragon, Garp reconocía a Sabo, ese hombre era viejo y todo, pero tiene una buena memoria. Antes que ellos pueden seguir, Sabo interrumpe:

— Si me conociese o no, ya formo parte del ejército revolucionario... no es necesario recordar un pasado.

Se escucha en un megáfono que Luscinda había despertado, y Koby es el primero en reaccionar y se apresura en salir, pero Garp le exige que se quede y que vaya el chico rubio, ya que ese lugar no les pertenece.

Luscinda ya conciente, no reconoce la habitación en la que se encuentra. Enderezando su espada rememora los segundos después de haber desplegado sus alas...

Según entiende, el vicealmirante cree que es mejor que su pupila esté lejos de las miradas de los marines.

Si avisan del origen antes de llegar a Marineford posiblemente obliguen a Garp a entregarla a la marina por ser hija de una prófuga.

Una lunaria, hija de una lunaria prófuga.

Ya no sería tratada como un ser humano, sino como un objeto de pruebas.

Podría ser peor... — se dice— no me entregaron al instante.

 — se dice— no me entregaron al instante

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝕆𝕁𝕆𝕊 𝕀ℕℂ𝔸ℕ𝔻𝔼ℂ𝔼ℕ𝕋𝔼𝕊 || 𝒐𝒏𝒆 𝒑𝒊𝒆𝒄𝒆 ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora