Ⅶ. Lo que Shakira me enseñó

84 15 2
                                    

La noche anterior había trascurrido más lento de lo normal, pero tener a Alek a mi lado fue de mucho apoyo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La noche anterior había trascurrido más lento de lo normal, pero tener a Alek a mi lado fue de mucho apoyo. Claro que las cosas aún seguían frescas, el señor y la señora Lorcan no podían dejar de observar la situación y mi padre estaba confundido. Ni hablar de Gareth y su nueva novia Dalia. Una noche de locos, así lo describiría. Sólo debía pensar en cómo mantener la farsa por un buen tiempo, pero hasta eso debía centrarme en otras cosas más importantes: yo. 

Eso también salió en la conversación de a noche.

—No he visto a Cali en la oficina últimamente, ¿la universidad está fuerte? —la señora Lorcan preguntó eso con mucho cariño.

—Yo... sí, he estado ocupada. 

—Es una lástima, Cali. Si necesitas algo nos comentas.

No podía evitar sentirme algo incómoda con esa situación, pero me ponía así porque era verdad. Me había dejado ir mucho tiempo, me centré en otras cosas y pasó el tiempo como no tuve idea. Ya era tiempo de recuperar todo lo que dejé ir y de poner la casa en orden. Esa misma noche, cuando las personas se distribuyeron en grupos, Alek y yo volvimos al balcón, aún con el frío.

—Calixte. Tienes un increíble potencial, pero no estás trabajándolo.

—Lo sé... —tampoco iba a justificar mi falta de crecimiento.

—Quiero verte brillar. Sé que eres una digna sucesora, y lo más probable es que sigamos trabajando juntos por las empresas de nuestros padres, así que sé que serás un gran aporte. Muéstrale al mundo de lo que eres capaz.

"Muéstrale al mundo de lo que eres capaz", que buena frase. 

Toda esta situación me hizo pensar que estaba dejando pasar mucho tiempo en cosas que amaba y necesitaba hacer, mi padre, dueño de una de las compañías más grandes en ciberseguridad estaba constantemente en reuniones para nuevas sociedades con más empresas, entre ellas la de lo Lorcan, una compañía de tecnología de punta. Ambos se ayudaban mutuamente en crecimiento y desarrollo, por eso el vínculo de ambas empresas era esencial de seguirla manteniendo, ya que juntas hacían que se mantuvieran entre el top 5 en sus respectivas categorías cada año. Yo sería quien ayudaría a seguir el legado de mi padre, por eso todo lo que hacía me ayudaba a poder estar a la altura. Amaba todo lo relacionado a ese mundo, y mis habilidades en el área social y de creatividad ayudarían a impulsar aún más la innovación que estaba dispuesta a impulsar.

Mucho de lo que estaba aprendiendo con mi padre me ayudaba, pero no daba todo de mí. Me centraba en otras cosas, que ahora que me hicieron perder el tiempo. 

Hasta hace poco también había renunciado a un trabajo con una mala jefa, curiosamente fue una horrible experiencia, pero quería tratar de llevar conocimientos nuevos, aunque eso no pasó: sólo podía sentir la sobre-explotación sobre mis hombros. Así fue como papá me dijo que me saliera, no me estaba haciendo bien por ningún lado. 

Elígeme, cariñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora