Shoganai² -Spider Socorro-

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Una fruta se mostró frente a un Spider somnoliento, que miró hacía atrás con rapidez.

La confusión adornando su cuerpo al ver la fruta con un palo dentro.

Sus ojos se relajaron al ver el rostro de Vittoria, con una sonrisa tan grande que casi parecía que iba a salirse de su cara.

—¡Feliz mesiversario, indígena!

Bromeó la chica sentándose como un indio mientras le tendía la fruta.

Spider sonrió agarrandola, apartando el palo antes de volver a mirar los ojos azul eléctrico de la chica.

Aquellos ojos que le recordaban a las noches despejadas, al agua de una gruta perdida, a la paz que siempre había ansiado.

—¿Mesiversario?

—¡Claro! Llevas un mes con nosotros, es tu primer mesiversario.

Spider sonrió, pasando sus brazos por la cintura de la chica, cargándola para ponerla entre sus piernas.

Ambos tan cerca como podían estar.

Pensó en todo lo que había cambiado durante ese mes.

Vittoria se había convertido en un gran apoyo para él, una fuente de revelación. Vittoria se había convertido en su sitio seguro, donde podía ser él mismo sin importarle el pasado o el futuro.

Vittoria era su presente, y le encantaba compartirlo todo con su presente.

Para Vittoria, Spider había sido ese rayo de luz que alumbraba sus mañanas, que le daba un sentido a levantarse.

Lo que antes había sido una vida llena de aburrimiento, ahora era una vida llena de aventuras, cada día distinto al anterior.

Y todo gracias a Spider.

—Gracias, Vicky, feliz mesiversario a ti también.

Vittoria sonrió abrazando a Spider con fuerza, con brazos y piernas debido a la posición.

Aquello hizo que Spider cayera de espaldas contra el viejo colchón, abrazando también la cintura de la chica como fuerza.

Ambos reían cortamente, felices en aquellos momentos en los que olvidaban dónde estaban o por qué estaban allí.

La puerta de la base se abrió, Vittoria se reincorporó mientras Spider alojaba el abrazo en su cintura.

Quaritch observó a ambos adolescentes antes de darle una mirada de aprobación a Vittoria.

Esta se removió incómoda en su sitio, recordando el trato que había hecho con Quaritch, pero que no estaba cumpliendo.

Spider notó aquello, por lo que le dio una mala mirada al mayor.

—Venga, tortolitos, aún tenemos cosas que hacer.

Quaritch cerró la puerta una vez se fue.

Vittoria se levantó sin ayuda, agarrando la máscara en su litera, que era la de arriba.

Spider se levantó también, repitiendo las acciones de la chica antes de agarrar la fruta y partirla en dos.

—Ten.

Vittoria se giró sonriendo tímida al chico.

Siempre era igual, Spider no entendía por qué Vittoria se volvía tan tímida cuando Quaritch aparecía mientras se daban muestras de afecto.

Tenía muchas teorías, pero una cada vez tomaba más forma.

—¿Qué pasa?

Preguntó Vittoria al ver que el chico no se movía ni un centímetro.