Compañero de habitación.

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Vuelvo a mi habitación después del almuerzo y dejo mi bandolera en mi cama.
-Hola eh-dice un chico sentado en la silla del escritorio, sabía que era un chico.
Le miro y me sonrojo, aunque creía que era un chico empiezo a pensar en los detalles: ¿y si se ríe de mis cosas?¿y si hurga en mi ropa?¿y si, y si...? Me pongo tan nerviosa que tengo que sentarme en la cama, hiperventilando.
-Ho-hola -consigo mascullar.
-Siento si te he puesto nerviosa eh.
-No es nada...
-No me recordaba tan guapo- bromea y ríe.
Suelto una risilla nerviosa, no es precisamente guapo pero tiene un estilo que me resulta bastante atractivo, no es nada peculiar solo...único por decirlo de algún modo. Tiene el pelo negro y rizado cayendo por sus hombros, los ojos marrones y gélidos pero a la vez una sonrisa amable que destaca en el marco de su cara, luce una camiseta de Green Day, tejanos y conversers negras.
-Sí te molesto me voy eh
-No hace falta, yo solo venía a hacer los deberes antes de ir a las clases de la tarde- con los dedos cuento las horas que me quedan de tiempo libre.
Él me mira sonriendo y dice:
-Quedan tres horas
-Gracias...-nerviosa me rasco la cabeza y miro al suelo.
-No seas tan tímida, tendrás que acostumbrarte a mi presencia,¿no?
-Sí claro pero no es tan fácil.
-¿Por qué no?
-Pues porque tú eres un chico y yo soy muy tímida...
-Es cuestión se acostumbrarse -ríe, vuelve a ponerse los cascos y también vuelve a escribir lo que sea que esté haciendo en su escritorio.
Me tienta acercarme a su lado y mirar sobre su hombro para saber lo que hace pero opto por coger mis libros,me pongo los auriculares,activo mi lista de reproducción favorita y me siento en mi escritorio para empezar a hacer las actividades para mañana.
Él termina sus actividades o lo que sea que esté haciendo, cierra muy rápido el cuaderno con miedo a algo,coge un maletín y se va. Antes de cruzar el umbral de la puerta pone una mano en el marco,se gira y me mira.
-Por cierto, me llamo Tedd -sonríe y se va,cierra la puerta con un portazo.
Me quedo mirando la puerta cerrada,estoy perpleja,él es muy bruto. Siento la tentación de mirar entre sus cosas para saber lo que dibuja,pero prefiero terminar los deberes,no quiero llamar la atención de ninguna forma.
Al acabar saco mi portátil de la maleta y me llama mi madre por Skype, parece como si me hubiese estado esperando. Parece que ha estado llorando,lleva el pelo recogido en un moño y está acariciando a dogi, suspiro,cómo les hecho de menos y eso que solo han pasado dos días.
-Hola -me dice e intenta sonreír.
-Hola -le respondo con una sonrisa y la saludo con la mano.
-¿Qué tal todo? Intenté llamarte ayer pero no contestabas.
Estuvimos charlando un rato de trivialidades varias y miro el folleto.

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