5. Perdida

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Narra: Vera.

Estábamos en un gran atasco de coches abandonado,yo estaba hablando con Shane, la verdad era que aquel hombre me atraía mucho, era muy lindo conmigo y además, era muy guapo,y, cria que si seguía intentando conquistarlo, lo conseguiría, aunque cabe resaltar, que no estaba muy segura de mis sentimientos, pues ya no sabía si estaba enamorada de Shane, o si estaba enamorada de Daryl.

Entonces llegó Carl para enseñarle algo a Shane, y también llegó Lori, a si que creí que lo mejor era dejarlos solos.

-¿Como estás, Vera?- Me preguntó Dale.

-Mejor, gracias por haberme cuidado en la caravana.

-Hey, no es nada,en este nuevo mundo, debemos ayudarnos entre todos. - Dijo Dale.

-Tienes razón, Dale.- Dije para después irme a ver a Daryl.

-¿Como estás peque?

- Bien, y ¿tu?- Dije dando le un abrazo por detrás.

-¿Porque debería estar yo mal?- Preguntó cogiendo una de mis manos entre las suyas.

-No se, pensé que estarías mal por lo de Merle.

-Tu misma lo dijiste, Merle es un hueso duro de roer,estará bien.- Dijo él dando se la vuelta para verme.

Yo me quedé callada mirando le y suspiré.

- Siéntate un rato llevas bastante tiempo sin descansar, tienes cara de cansancio.

- No hace falta estoy bien.-Dijo él.

- Si, si hace falta, no seas gilipollas, anda, siéntate aquí y nos tomamos algo.-Dije con cariño.

El me miró, pensando en lo que acababa de decir y asintió.

-Vale, pero tú ten mucho cuidado vale, no quiero que te pase nada.

Yo sonreí y asentí.

Volví después de unos minutos con un par de refrescos y una tableta de chocolate, que me había regalado mi hermana al encontrarse la, porque sabía que amaba el chocolate.

Daryl dejó escapar una risita y me miró.

- ¿Que tienes, 10 años?

-No, pero no quiero que te dé algo por tu gilipolleces.

-No hace falta que te preocupes tanto por mi, nadie lo a echo nunca, y no quiero que empieces tu a hacerlo.

-¿Porque no?

Él se quedó callado sin decir nada.

- No vas a hablar,¿Eh?, Pues vale, me iré hablar con Shane.

-Ten cuidado con él, no quiero que te haga daño.

-No lo hará, él es una gran persona.

- Claaaaaro, y yo soy mujer.

-A veces pareces una mujer en su periodo.- Dije mientras me alejaba y me reía.

-¿Y tu entonces que eres?- Preguntó él desde la distancia.

- Una mujer sin periodo.- Dije mientras me giraba y le miraba.

- Por ahora...- Río él.

Después de un rato llegué hasta dónde estaba Shane.

- Hey, ¿que tal?

-Bien... Supongo...

En ese momento la sonrisa de Shane se borró y se convirtió en una de preocupación.

Somos tu y yo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora