Somos tu y yo.

11. La prisión.

Rick, Glenn y Hersel volvieron con un chaval. Tendria más o menos mi edad, quizás algo menor.

Rick y Shane habían ido a sacarle y a darle una oportunidad ahí fuera, pero habían vuelto con él.

Ahora mismo Daryl se encontraba en el pajar con aquel chaval.

Yo estaba desayunando con todos cuando vimos a Daryl salir del pajar.

-Son un grupo grande, treinta tíos, tienen artillería pesada y no buscan amigos. Si pasan por aquí los hombres moriremos y las mujeres desearan estarlo.

-¿Que le has echo?-Pregunto mi madre al ver sus nudillos ensangrentados.

-Charlar con él.

Daryl trato de volver a donde estaba pero le intercepte.

-¿Por que vuelves?

-Tus nudillos, deberías curarlos.

-Pues ya lo haré yo.

-Dejame ayudarte.

-No necesito tu ayuda.

-Ya se que no, pero quiero ayudarte.

Él me miró guardando silencio pero al final suspiro y asintió.

Empecé a curarle, ambos guardabamos silencio.

-Daryl yo... No te quería solo para un polvo. Eres mi mejor amigo y... no quiero perderte... Daryl... Te quiero mucho...

Él guardo silencio mirándome hasta que después de unos segundos miró hacia abajo y suspiro.

-Perdona... Yo me comporté como un idiota... No pienso que seas una puta... Yo.... No se en que estaba pensando...

Yo sonreí y le abracé.

-Eso ya no importa. Solo no vuelvas a decirlo, ¿okay?

Él asintió con la cabeza y también me abrazó.

Después de lo de Randall, Shane se volvió loco e intentó matar a Rick, y al final, acabamos huyendo de la granja ya que acabo ardiendo. 

Yo estaba acorralada, mi madre había ido con Glenn y Maggie y yo estaba perdida.

Varios caminantes me acorralaron cerca de una de las vallas yo maté a tres pero todavía quedaban dos.

En ese momento, vi como una flecha atravesaba el cráneo de uno de ellos y al otro le clavaba el cuchillo en el cráneo.

-Venga, sube.

Yo subí rápidamente a su moto y ambos nos fuimos en su moto.

-¿Crees que alguno seguira vivo?

-Casi todos deben de haber sobrevivido.

Después nos encontramos todos en la carretera y nos fuimos.

9 MESES DESPUÉS.

Rick y Daryl habían encontrado una cárcel.
Pasamos todo el dis despejandola cuando al final, nos sentamos en la ladera de la Cárcel. Mañana despejariamos algún pabellón, pero ahora debíamos dormir.

Yo me subí a la caravana donde estaba Daryl vigilando.

-Ten, te he traído comida.

-No hace falta.

-Si hace, ha pasado mucho tiempo desde que comiste por última vez.

Él asintió y empezó a comer un poco.

-Uhm...-Gruñi yo mientras empezaba a mover mis hombros.

-¿Qué te pasa?

-No es nada, solo... Tengo los hombros cargados de tanto ir de acá para allá.