Somos tu y yo.

10. ¿Shopia?

(Debo avisar que cambie un poco mi forma de escribir. Espero y les siga gustando. Un beso ♡)

Después de lo que había pasado entre Daryl y yo la noche anterior no sabía demasiado bien que hacer. Cuando nos sentamos todos a desayunar, uo me senté con mi madre, quien estaba comiendo, y no al lado de Daryl, como de costumbre. Probablemente, por vergüenza.

-Chicos ehh... debo contarles algo... Hay... Caminantes en el pajar... - Dijo el coreano mientras agarraba su gorra entre sus manos y nos miraba nervioso, sin saber demasiado bien que hacer.

Rick y Shane se quedaron callados mirándose como debatiendo mentalmente que hacer.

La sorpresa del grupo era bastante grande, y la verdad, a mi madre y a mi nos inquietaba aquel dato. Mi hermana podría estar allí y nosotros no lo podríamos saber, y aquello, nos daba miedo.

Rick decidió ir a hablar con Hersel y los demás nos tuvimos que quedar en nuestro "campamento improvisado".

Yo me encontraba en la parte de arriba de la caravana de Dale haciendo guardia cuando sentí una presencia detrás mía, probablemente era Glenn, llevaba toda la tarde tocando las narices preguntándome que si había cogido yo sus gorras.

-Glenn, ya te he dicho mil veces que no te he cogido tus malditas gorras...

-No soy Glenn.- Dijo una voz masculina grave y áspera.

Un escalofrío recorió todo mi cuerpo y me giré.

-Hey Daryl. ¿Necesitas algo?

Él ignoro mi pregunta y me miró fijamente para después sentarse junto a mi.

-Sobre lo de anoche... Perdona si fui algo bruto... no se en que estaba pensando...

-¿De que hablas?-Pregunté desconcertada.

-De que quizás... me excedí un poco y fui muy brusco y...

-Fue genial... Estuviste genial...- Le corté yo.

Él esbozó una sonrisa.

-Me alegro que te gustara...

Ambos nos quedamos callados mirando el atardecer.

-Oye yo... siento lo que ocurrió anoche...-Dije rompiendo el silencio.

-¿A quéte refieres?

-A que no debería repetirse.-Yo tomé aire y después lo solte lentamente.- Mira, fue genial... Me encanto y todo eso pero... podría dañar nuestra amistad... y no quiero perderte, ¿sabes? Eres mi mejor amigo.

Yo me giré y le miré con cariño pero mi sonrisa pronto se desvaneció cuando me di cuenta del duro gesto que había en su cara y de él odio que había en sus ojos al mirarme.

-Daryl, ¿Estas bien? ¿Qué ocurre?-Dije mientras ponía una mano en su hombro.

El quito mi mano de su hombro con un gesto brusco.

-No me toques...-Masculló enfadado.

-Okay perdona.

Pasaron unos segundos que se sintieron eternos hasta que él finalmente abrió la boca y dijo:

-¿Sabes? Si solo era un estúpido juego para ti, si todo lo que querías era acostarte conmigo, podrías habérmelo dicho. Abriamos acabado mucho antes...-Dijo apartándose de mi lado y bajando las escaleras de la caravana.

-Oye Daryl espera yo nunca he dicho eso, ¡nunca dije que solo te quisiera para un polvo!

Mientras se alejaba le escuché murmurar para si mismo: