Capítulo 12: Una conversación alterna.

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Sentado en esa silla, solo hay un hombre viejo, arrugado, hombros caídos, cabello canoso, y en su mirada, enojo y frustración, pero también apagados, un hombre derrotado por la vida, un hombre que quería morir.

Sentado en esa silla, solo hay un hombre viejo, arrugado, hombros caídos, cabello canoso, y en su mirada, enojo y frustración, pero también apagados, un hombre derrotado por la vida, un hombre que quería morir

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«...»

El hombre solo se quedó en silencio.

«¿Eres un Dios?» Pregunte.

«...»

«¿Eres un Aventurero?» Volví a preguntar.

«No.» Respondió el hombre.

«¿Entonces...?» Dije para mí mismo, tratando de pensar, Ruijerd no lo detecto, debería estar muerto, a menos que él lo haya matado primero, pero es improbable.

«Mi nombre es Rudeus Greyrat.» Dijo aquel hombre.

«¿Y...? No te reconozco. ¿Eres parte de una rama de la familia Greyrat?»

«En realidad. Se supone que tú eres yo.»

«¿Eh...?» Jadea un poco mientras trataba de comprender lo que dice.

«Mi nombre es Rudeus Greyrat. Hijo de Zenith y Paul Greyrat. Soy de una línea alterna.» Dijo Rudeus.

«¿Cómo te puedo creer?»

«Hmh... Veamos... Hice un agujero en mi casa cuando tenía aproximadamente entre 5 y 8 años porque aún no sabía usar bien la magia, el hechizo era de agua.» Respondió él.

«Sigo sin creerte.»

«Uff...» El hombre dio un pequeño suspiro.

Así que algunas cosas son iguales en otras líneas temporales, a menos que este tipo viviera en el pueblo, que lo dudo en lo absoluto, tenía anotado a cada persona del pueblo, incluso pregunte si había gente fuera de este.

«Hmm. Bien, ¿qué haces aquí?» Pregunté, ese hombre se ve en la ruina, puede que sea poderoso, pero por su postura denota que ya está cansado de esta vida.

«Mi hechizo no funcionó del todo. Pero después de estar unos segundos aquí me di cuenta de que tú eres el que me reemplazo, soy alguien diferente en todo sentido a ti. Pero compartimos el mismo universo al mismo tiempo. Para resumir, yo logré reencarnar en mi universo, pero tú no. Y en este universo tú lo lograste y yo no.» Dijo Rudeus, dejándome más confundido, un hechizo capaz de viajar entre líneas temporales, no lo creí posible.

«...» Solo atiné a quedar en silencio, repasando la información.

»Mira muchacho, yo vengo del futuro. Y he venido hasta aquí para advertirte de algo que pasara, algo demasiado malo, pero que debes tomar absoluta precaución. No me queda mucho tiempo de cierta forma, he venido hasta aquí con un hechizo de teletransportación que he creado, pero algunos de mis órganos no lo hicieron.»

«Ve al grano.» Dije.

«Yo lo sé todo. Pero por lo que veo eres mucho más inteligente que yo, este mundo depende ti y a la vez no. El Dios-Hombre... Hitogami»

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