Advertencia: —Narrado en tercera persona. —Eli x male!oc. —Sin relación en el Webtoon, mención especial a su hija Yenna.
—OS no tan extenso (800 palabras máximo)
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Seungmin miraba felizmente cómo Eli tomaba a su pequeña niña entre sus brazos alzándola hasta el cielo, oyendo perfectamente esa risa tan alegre por la diversión que pasaba en el momento. Suspiro feliz, ver a su novio con su hija, era una escena que agitaba su corazón.
Son una familia de felicidad y amor, sobre todo la pequeña que es llenada de mimos por parte del castaño.
Siempre tenía las mejores cosas para su cuidado, ya que Seungmin tenía muchísimo dinero, pero en jerarquía era de clase alta, gracias a su padre empresario de cosméticos y su madre una políglota famosa. Con ello, su cantidad excesiva de dinero.
Pero siempre le enseñaron principios y, gracias a eso, Seungmin era una persona humilde, casi nunca gastaba dinero a que no sea necesario y compraba lo que era para su vida personal.
Ahora que tiene a dos maravillosas personas, su dinero tendría muchísimo mejor uso.
Aun así, Eli siempre se negaba a recibir esa caridad de su novio, sin embargo, él era tan necio que terminaba haciendo todo lo contrario a lo que pedía, su amor por ambos era tan grande que pensaba en su bienestar, la calidad de vida.
—Eli, creo que debes ir a comprar la leche para Yenna, estaba haciéndola y no le queda para la noche, entonces no tendrá para mañana. Por favor, querido, vaya a comprarle. —Seungmin con cuidado saco una cantidad de dinero excesivo fue donde su novio que había dejado a Yenna entre sus brazos, ambos viendo curiosos del dinero entregado. —También algo para la cena, es momento que tengas comida.
—Seun...
—Nada de nada, vaya que le estoy mandando, sea buen novio.
Sonrió feliz a su persona, agachándose a besar sonoramente sus cerezos que cuándo se separó noto los ojos cerrados de Eli y los aplausos pequeños de su niña. Acaricio la cabeza de la castaña, riendo ligeramente.
Eli le entregó a la pequeña a sus brazos, mientras que él le daba el dinero. Una vez todo cambiado, el rubio beso a su novio de forma desprevenida para salir de ahí con una enorme sonrisa. Dejando a un castaño totalmente sonrojado por esa acción.
Aun teniendo en cuenta que él lo beso primero.
Suspiro, cuando Eli dejo la casa pequeña que tenía, se sentó en el sillón con la pequeña en brazos, dejándola en su regazo, vio sus grandes ojos expresivos y sonrió.
—¡Adorableee!
Se acercó a besar todo su rostro ganándose risas traviesas de la menor, que se dejaba mimar por él.
Siendo una niña inteligente, tomó su rostro logrando detener los actos de Seungmin, se vieron a los ojos unos segundos y la menor apretó las mejillas del mayor con fuerza abultando los labios de él.
Río fuerte al ver la forma que tomaron.
—Defanme.
Río más fuerte, la menor ante esas palabras poco entendibles, Seungmin lo hacía todo a propósito. Amaba ver la risa tan sincera de Yenna.
—Nmo temdars galetas.
Mágicamente, la menor se detuvo viéndolo serio, Seungmin carcajeo ante la mirada sería que poseía. Rápidamente, beso su frente para calmar ese odio.
—Bromeo. Siempre tendrás galletas del... Famoso Seungmin.
Algo que le costaba decir al castaño era papá. No quería llenar un vocabulario a Yenna que no le correspondía, pese a que fuese pareja de Eli, sinceramente prefería que tomara tiempo que ella lo dijera y no enseñarle, incluso hablarlo con Eli.
Todo dependía si él dejaba que la pequeña le llamase de ese modo. Pero, nunca se lo inculcó. No era su deber enseñarle.
—Papá.
—¿Ah?
—¡Papá!
Seungmin quedo atontado con las palabras de su niña. Le dijo papá.
¡Jamás le enseñó eso!
Estaba nervioso, pero también emocionado que le dijera de ese modo. Sintió las lágrimas salir de sus ojos, todo enfrente de la pequeña, actuando con rapidez, tomó su cuerpo para abrazarla y sollozar en silencio.
No tenía que verle de ese modo.
—Yenna...
Sollozó su nombre, emocionado.
En ese momento entró justamente Eli, que al ver la situación cayeron las compras, corrió dónde estaban, ganándose enfrente de su novio, tomando su rostro entre sus manos, alzando el bello rostro que poseía, limpiando sus lágrimas.
—Seun, ¿sucedió algo?
—Yenna... M-me llamo p-papá. —su voz era entrecortada, pero con un poco de hipo. —M-me di-dijo eso.
—Oh, cara mía... Yo le enseñé eso.
—¿E-en serio? —miró a sus ojos, brillando más de lo que antes estaba. Feliz.
—Sí, le enseñé cuando estabas lejos de nosotros, ya era momento que Yenna tuviera una familia completa. Era sorpresa, pero se me adelantó.
Eli abrazó el cuerpo de su novio junto al de su pequeña, y así correspondió la altura menor, logrando formar un abrazo familiar.
