Freddie Lounds no pensaba quitarle los ojos de encima a Clarice Starling. Había conversado con el Doctor Frederick Chilton sobre ella y ambos llegaron a la conclusión de que podría ser, quizás más importante de lo que se veía. Aquella muchacha insignificante, podría ser un puente.
Muy a su sorpresa, el Doctor Chilton aún seguía vivo, resultaba que tenía una resistencia de hierro inclusive después de todo lo que había pasado a manos de diferentes psicópatas.
Freddie solo lo iba a ver porque necesitaba de sus ideas, porque él veía cosas que en ocasiones ella ignoraba y porque tenía firma con una importante y reconocida editorial que jamás le ayudaría, por ser parte de la prensa amarillista. En conclusión, ambos se necesitaban, ella para poder finalmente escribir algún best seller y él, para sentirse acompañado, para sentirse útil.
Freddie Lounds sabía también de las visitas semanales que tenía Clarice con Bedelia.
Y realmente no le importaba su contenido, mientras no fuera información que pudiese agregar al libro, claro. Pero si Starling tenía problemas emocionales o si comenzaba a tener una singular relación íntima con la Doctora Du Maurier, no le era de utilidad.
Ella misma se había acostado con Brian Zeller para obtener información.
¿Por qué le molestaría que otras personas lo hicieran?, no era tan descarada.
El problema real estaba en que ahora, Clarice se sentía tan a gusto a solas con Bedelia, que no recurría a ella para absolutamente nada y sabía, que algo nuevo estaba pasando en el FBI. Respecto a Buffalo Bill o tal vez respecto al Doctor Lecter y Will Graham.
Por eso la seguía, para ver si alguna vez salía con algo que llamara su atención; alguna carpeta o bolso con el que no entró. Porque de ser así, se merecía saber, ¿no?, ella le mostró la carta que le envió Hannibal Lecter, las cosas debían ser en ambos sentidos. Era un trato justo.
Pero Clarice jamás bajaba del complejo de departamentos con nada que fuese ajeno en sus manos, solo era ella con rostro taciturno. Ella y sus pensamientos.
La curiosidad devoradora con la que siempre había vivido la superó y decidió preguntar, intentar molestarla para sacarle algo por simple cansancio y entretención. Tal vez entre todo eso le diría algo con lo que ella podría divertir a sus lectores.
—¡Starling! —le llamó antes de que subiera a su auto— ¿Hay algo nuevo?
Clarice despertó de sus infinitos pensamientos y volteó los ojos a penas la vio acercarse.
—¿De verdad vas a estar tras de mi siempre?, soy solo una aprendiz del FBI.
—Aprendiz del FBI o no, ya eres parte de la rara tríada junto a la Doctora Du Maurier y yo, ¿por qué ahora se reúnen a solas?, las extraño un poco.
—¿Quieres venir y escuchar mis problemas?, bien, si es así quedas cordialmente invitada, no necesito decirte hora ni día porque ya los sabes.
—Así que, ¿solo es eso?
Clarice se apoyó en su auto y se cruzó de brazos. Freddie la observó con extraño detenimiento.
—Ya te dije que si tenía algo te diría, te lo prometí, de Buffalo Bill y Catherine Martin no se sabe nada lamentablemente y respecto a mis citas con la Doctora Du Maurier es solo... terapia.
ESTÁS LEYENDO
Contratransferencia [Hannigram]
FanficContratransferencia: Conjunto de actitudes, sentimientos y pensamientos que experimenta el terapeuta en relación con el paciente.