La sensación era desagradable, el dolor era insoportable y mientras el fuerte sabor de la sangre se mezclaba con el dulce aroma de las Sakuras que desprendían de su boca, la vida de Izuku se consumia cual vela encendida.
--Por que...¿por que no pue...
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KATSUKI Después de que aquellos dos salieron de la cafetería, mi impulso por seguirlos me domino ciegamente y sin poder detenerlo fui tras de ellos. Kirishima lo noto y me preguntó a dónde iba, podía notar la preocupación en sus ojos, pero en ese momento solo me importaba Deku.
—Iré al baño, no te preocupes. —expresé tratando de calmarme.
No quería que nadie notará los inmensos celos que sentía.
—Ok, nos vemos en el salón en 15 minutos. —agrego mientras me sonreía con sinceridad; quizá en otro momento hubiese valorado su sonrisa, pero ahora no.
—Si. —espete saliendo del comedor.
Una vez afuera, arranque todas mis fuerzas en una carrera que solo yo estaba compitiendo, no encontraba a Deku por ninguna parte y necesitaba verlo para asegurarme que esa estúpida no le hiciera nada.
Después de estar corriendo por todos los pasillos finalmente los hallé, ambos estaban hablando y posandome detrás del muro comencé a escuchar su conversación.
—A-¡Aceptas o no! —grito esa mujer.
No había respuesta de Deku y eso me tranquilizaba, pero desgraciadamente no duró tanto por qué él respondió.
—Está bien, iremos al cine. —dijo con un tono notorio de sinceridad.
"Maldito seas tú y tu seriedad Deku, si no hubieras cambiado tanto esto no hubiese sucedido" —pensé apretando el puño con coraje.
Deku me hacía enojar muchísimo y más porque estaba permitiendo esto.
—¡Excelente! —dijo ella chillando de la emoción—, pasaré a las 5:00 pm por ti, ¿ok?
—Katsura... ¿No crees que lo más adecuado es que yo valla a recogerte a ti? Digo, después de todo yo soy el hombre y debo de ser un caballero contigo porque vamos a salir al cine.
Un silencio reino entre los dos, aquel silencio me estaba poniendo los nervios de punta. No sabía lo que estaba sucediendo, iba a hechar un vistazo cuando ella gritó de repente contestando a la pregunta que Deku había hecho.
—¡No! ¡Y-Yo iré por ti! —agrego como respuesta esa necia y maldita mujer.
En serio me estaba sacando de quicio y debía controlarme para que todo saliera bien.
—Ok, bueno, nos vemos más al rato. —finalizó ese nerd mientras escuchaba los pasos de ambos alejarse.
Tratándo de procesar lo que había escuchado, el timbre sonó anunciando que la hora del receso había concluido. Esto que hace poco escuche había sido difícil, pero tenía que idear un buen plan para arruinarles la salida.
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