PÉTALOS DE SANGRE - 🧡Katsudeku💚 [Editando]

Capitulo 12: Rehabilitación

HINODE
Me sentía más tranquilo, todo salio muy bien e Izuku estaba fuera de peligro. Me alegraba haber sido de mucha ayuda, había terminado con el mal que por tantos años conservo, ya no sufriría, ya no le haría daño.

Consultando unos expedientes, la enfermera en turno entro para darme todos los informes de como seguía Izuku.

—Doctor, todo está bajo control, el paciente ha estado estable en los últimos dos días.

—Ok, gracias enfermera; ¿aún no despierta?

—No, aún no. —agrego ella.

—Muy bien, manténgame informado de su evolución y recuperación, por favor.

—Si doctor. -finalizó para salir del lugar.

Ya habían pasado dos días y aún no despertaba, estaba ansioso, quería verlo a los ojos para abrazarlo y decirle que tenía otra nueva oportunidad de vivir su vida, en lo más profundo de mi ser, ansiaba que fuera así, pero necesitaba verlo para decírselo, para decirle que todo había salido de maravilla.

—Despierta pronto pecoso... —susurré en el interior de aquella habitación.

NARRADOR

Una semana después de la operación, Hinode se hizo responsable de arreglar las cosas pendientes que el Omega había dejado. Primero fue con la tía Inko (mamá de Izuku) para explicarle que por descuido el menor se había lastimado al entrenar con su Quirk. Al principio la mujer se altero y desbordándose en un llanto imparable, el alfa la consoló para que se tranquilizara.

La había llevado hasta el hospital para que viera el estado de su hijo, seguia sin despertar, pero todo estaba estable dentro de él.

—¿Cuánto lleva dormido? —pregunto Inko sin dejar de temblar.

—Lleva una semana.

—E-¿El despertará pronto?

—Si, lo hará. —afirmó Hinode para calmar a su tía.

El azabache sabía que en cualquier momento despertaría; todos los pacientes que poseen esta enfermedad tienen que estar bajo una pequeña invernación, de esta manera el cuerpo se adaptará sin el sentimiento que los mataba. Ese era el motivo de su letargo, pero Hinode no era capaz de revelarle esta información a su tía, no podía, sabía que eso le rompería el corazón y evitando cosas innecesarias, optó por decir una pequeña mentirilla.