Capítulo No.38

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Hacía tiempo que se había puesto el sol cuando Hyun se detuvo en el camino de entrada y apagó el coche. La casa estaba iluminada en la oscuridad y podía ver las siluetas de los muebles en las ventanas, iluminados por la suave luz amarilla de las lámparas. Abrió la puerta del coche y salió, con los pies crujiendo en el asfalto arenoso y el corazón oprimido en el pecho. Solo iba por un baño, no había tiempo para más antes de volver a quedarse con Saeng, pero el médico había sido claro: si quería estar con el necesitaba sacarse de encima el polvo de África.

Procuró no tardar mucho y luego pasó por la casa de sus padres, a darle un beso a SuJin, que ya dormía en su cunita. Cuando él llegó de nuevo al hospital sus hermanos aprovecharon para ir a descansar también.

"Deberías irte, has estado muchas horas de viaje".
Le dijo Hyun a HyungJun y el asintió.

"Me iré en un rato, pero primero voy a asegurarme de que estés bien". 
Dijo su hermano acariciando su cabello.

Hyun se sentó junto a Saeng y tomó su mano. quería abrazarlo y decirle que lo sentía. Pero todavía debían atravesar un largo camino de dolor antes de llegar a cualquier clase de perdón.

"Lo siento mucho. Lo siento mucho, mi nutria". 
Le dijo, besando sus dedos.

HyungJun negó con la cabeza y se acuclilló a su lado.
"Oye, nada de esto es culpa tuya. Saeng no se enfermó solo porque te fuiste, ha estado bien cuidado, lo mismo el que la nena, pero no podemos controlar todo. Y sobre lo demás... el motivo por el que te fuiste... Eso tampoco es tu culpa. Fue otra persona quien mató a SooHyuk. Otra persona es la culpable. No tú".
HyungJun puso las manos a ambos lados de la cara de Hyun.

"Lo sé, pero yo....".

"¡Pero tú nada! SooHyuk se murió porque Park JungMin quiso que se muriera".
Sentenció y vio a su hermano arrugar el ceño con un gesto de incomprensión.

"¿De qué hablas?"
Murmuró aturdido.

"De que JungMin sabía que lo iban a matar, sabía que lo estaban matando y no hizo nada. El pudo evitarlo en cualquier momento, pudo llegar a tiempo, intervenir... pero decidió no hacerlo, así que la muerte de SooHyuk pesa sobre sus hombros, no sobre los tuyos".
Respondió HyungJun.

Hyun sintió que se le llenaban los ojos de lágrimas y sacudió la cabeza para espantarlas. Las palabras de consuelo de su hermano significaban mucho para él, pero no estaba seguro de poder creerlas.

"¿Cómo sabes eso?"

"Porque lo hice miembro honorario al Club de Alturas mientras íbamos a buscarte".

"¡HyungJun!"

"¡Ay por dios, somos adultos! No hay que escandalizarse por algo tan simple como el sexo. Pero volviendo a lo importante... JungMin lo permitió. Llámame loco, pero creo que tuvo un motivo, creo que Saeng y tu hija no son las únicas personas a las que SooHyuk lastimó, y a diferencia de ti, su muerte solo le está provocando una profunda satisfacción. Park JungMin duerme como un angelito, doy fe".

Hyun pasó saliva mientras lo invadía aquella extraña mezcla de emociones. Sentía el dolor de todo lo que estaba viviendo con Saeng, pero también una sensación de alivio. Era libre. Libre de su propia conciencia y eso era todo lo que necesitaba para estar en paz.

De repente la puerta de la habitación se abrió y el médico entró.
"Solo nos tomaremos un momento para una evaluación de rutina, les agradecería que esperaran afuera". 

Los dos salieron de la habitación y se dirigieron al pasillo, donde cada uno encontró una silla para sentarse.

"¿Cómo te sientes con respecto a la anulación del matrimonio?"
Preguntó su hermano.

Todo por una piadosa mentira.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora