¿Porqué no pones esos hermosos ojos por un segundo en mí?
No puedo creer que por fin estemos a solas, no puedo creer que casí me voy a casa.
¿Qué probabilidades hay? Todos están bailando y el no está contigo.
El universo debió haber planeado esto...
Había pasado una semana desde ese incidente, justo ahora estaba jugando un juego de mesa con _____ en el suelo de la sala de su apartamento, ya que Brian le canceló una cita... Otra vez.
───¡Gané! De nuevo.
───¡Eso no es justo! ¡Juguemos otra vez! - Pidió la revancha.
───Nunca vas a poder ganarme, soy muy bueno en este juego, yo soy mejor en todo.
───Eso ya veremos, solo estaba distraída, te apuesto lo que quieras que voy a ganarte esta.
Se que eres competitiva, pero yo soy mejor, soy mejor en todo lo que te puedas imaginar, solo necesitas comprobarlo.
───¿Y si pierdes qué? ¿Que me darás a cambio?
───Lo que quieras, ya veras que yo ganaré.
───Bien, si tú ganas te daré lo que quieras.
Seguimos jugando un rato.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Yo gané, como siempre, yo siempre ganó.
───Es hora de pagar.
───Y ¿Qué es lo que quieres?
───A tí, solo a tí.
Me acerqué hasta ella y la bese, al principio se negaba pero al final correspondió, ella se acostó en el suelo y yo me coloque sobre ella sin separar el beso.
La temperatura corporal subía cada vez más al igual que mi pulso, la bese desde sus mejillas hasta su cuello, dejando marcas como si fuera mí territorio.
Ella hacia pequeños suspiros que hacían que mi presión sanguínea se elevará cada vez más.
Comenzaba a tener una erección y mi respiración se agitaba más y más, ella besaba mi cuello y lo mordía.
───Tim - Soltó otro suspiro agitado - ¡Tim!.
───¿Ah?
───Estaba diciendo que gané, ¡Mira!
Efectivamente, ella había ganado, solo había tenido otro escenario ficticio.
───Felicidades, pero sólo me distraje, si no yo hubiera ganado como siempre.
───Si claro, lo que digas, pero como gané quiero que me lleves a comer algo, como recompensa.
───Pues ya qué.
Los dos nos pusimos una chaqueta ya que afuera estaba algo frío, estábamos en octubre, época de otoño.
Subimos a mi auto y conduje hasta donde ella me indicó.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
