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Una vez en Seattle, los caminos se dividieron, Duncan y Everly en el hospital, Burke en el banco de trasplantes y Aleene en cirugía, estaba desconcertada, hacía movimientos erráticos y casi no prestaba atención a lo que tenía que hacer, por lo que decidió abandonar la cirugía derivándosela a Miranda Bailey. Salió del quirófano desorientada, chocando contra un cuerpo el cual la freno de golpearse contra un carro de suministros.

— ¿Allie, estas bien? -pregunta la voz de Derek- Aleene -la llama chasqueando sus dedos frente a la cara de la rubia quien lo miraba pero no era capaz de decir nada- ¡Aleene, reacciona! -gritó sacudiéndola y nada-

Mark quien pasaba cerca junto a Addison nada más escuchar el nombre de su hermana corrió hacía donde provenía la voz.

— ¿Qué le sucede? -cuestiona preocupado-

Derek no sabía que responder.

Luego de unos segundos más, finalmente habló.

— Está aquí -susurro-

Nadir la comprendía.

— Everly... Está aquí, en la sala 27 de pediatría -explica un poco más lúcida- Mi engendro está aquí

No era capaz de decirle "hija" esa palabra sonaba ajena.

Derek logró armar el rompecabezas, todo lo que Aleene alguna vez le había contado, Amelia le habían dicho que Aleene estaba embarazada y no se lo había tomado en serio, la repentina llegada de Aleene, todo tenía sentido.  La rubia se escapo, esquivando ese ataque de preguntas y se metió a un cuarto de descanso en busca de un poco de silencio, cosa que no consiguió, puesto que detrás suyo la puerta se abrió brutamente.

— ¿Y tú que mierda quieres? -pregunta Aleene enojada ante tal falta de privacidad-

— ¡Oye, tranquila! -responde Addison acercándose a paso lento- Quiero hacerte compañía, no quiero respuestas ni haré preguntas...

Aleene permitió que Addison se recostase con ella. Addison permaneció en silencio, comprendiendo que Aleene lo que menos necesitaba era alguien diciendo cosas al azar, luego de una hora la rubia hablo.

— Yo no quiero ser madre, nunca quise serlo -solloza, la culpa recorría su cuerpo- El me obligó, amenazo con contar todo lo que había hecho -llora- Yo realmente jamás quise tenerla, intente abortar, más de una vez y nunca resulto -confiesa-

— ¿Y por qué la dejaste ahora? -cuestiona Addison-

— Por qué intente amarla, hacerla mi hija y no pude, fue más grande que yo el rechazo hacía mi cuerpo, el vacío que tenía en mi pecho luego de ser tratada como una puta incubadora y vaca lechera, el trauma de ser madre en contra de tu voluntad es horrible -solloza, con la voz entrecortada de tanto llorar-

Addison sentía un revuelto en su estómago, pues su deseo de ser madre y su comprensión hacía Aleene se peleaban para expresarse.

— ¿Quieres que salgamos así puedes despejar tu cabeza?

Aleene negó con la cabeza

— Quiero irme a casa -susurra Aleene-

Addison salió de la sala y busco al jefe, para informarle que saldría junto a Aleene que no se sentía bien.

— No, Addie... Demi está en casa, no es necesario que vengas conmigo

A Addison no le importo, pues la salud de su "amiga" era lo más importante y estaba dispuesta a dejar de lado sus diferencias con la pareja de Aleene. Una vez en la casa de Aleene, el ambiente se sentía tenso aunque Demi aún no sabía de la presencia de Addison, hasta que llego a casa.

— ¿Qué hace esta zorra aquí? -pregunta nada más llegar y ver a Addison sentada junto Aleene quién se negaba a tomar un té de hierbas raras-

— ¡Respétame, hija de tu puta madre! -responde Addison-

— Oigan, tranquilas -interviene Aleene- Addison está aquí porqué tuve un percance en el hospital y no quería dejarme sola en casa por si volvía a ocurrir... solo estaba siendo amable -explica-

— ¡Ja! Amable para poder acostarse contigo -rueda los ojos Demi-

— Lo mio con Aleene ya es cosa del pasado, respeto vuestra relación -habla Addison-

Demi ignoro por completo a Addison y se metió a la ducha, dejando a las dos mujeres solas

— Es una psicopata y tú, una suicida por estar con ella -critica Addison-

— Eso es algo bueno... Ella mataría por mi y yo moriría por ella, dime... ¿Una persona cuerda haría eso? -pregunta- Claro que no -se responde sola-

Luego de unos minutos de silencio, Addison habló.

— Alie -llama, recibiendo un "ajam" de respuesta- Tu vales más que esto ¿Lo sabes, verdad? Tienes un ex esposo que te ama, un hermano que te ama, los Shepherd's y me tienes a mi, no mereces esto -susurra-

Era un susurro tierno, transmitiendo comprensión y tratando de brindar confort a su amiga.

— ¿Qué estas tratando de decir? -cuestiona confundida- Demi es muy buena conmigo, entrenamos, yo trabajo, tengo tiempo libre, viajamos...

— ¿Y el amor? ¿La comprensión? Le he dicho que estas mal y lo ha ignorado

— Ha de tener un día malo, ella no es así -justifica Aleene-

Demi jamas actuaba asi, pero ya no se sentía completamente cómoda con su presencia. El tiempo paso y aquella conversación le rondaba la cabeza, por lo que una vez que se fue Addison, Aleene entro a la habitación y llamo a Demi.

— Mami, necesitamos hablar -susurra-

𝐆𝐞𝐧 𝐒𝐥𝐨𝐚𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora