ʀᴇʟʟᴇɴɪᴛᴏ ᴅᴇ ᴀᴍᴏʀ✨ [Jikook]

ʙᴏɴᴇᴛ ᴘɪᴇᴍᴏɴᴛᴇꜱᴇ 🍮

La campanilla sonó y el Alfa no tardó en dirigir su mirada hacia la entrada, aunque sus ansias se apagaron cuando se topo con la persona que había entrado. Resignado solo hizo una mueca y volvió a su celular.

— Ni me vayas a saludar, eh. — sarcástica pronunció la fémina mientras se sacaba el abrigo lleno de nieve húmeda. — Por lo menos finge que algo de alegría, ¿O es que no me extrañaste?

— Ajá, como si tener que aguantar ver tu jodida cara es divertido.

— Debiste pesarlo antes. — se encoge de hombros. — Además sabes que mí "jodida cara", es muy similar a la tuya, ¿no?

— Ni muerto dejo que asocien contigo.

— Lo sé, soy la más agraciada de la familia. Pero por consecuencia de tus actos, me tendrás aquí primito. Ve acostumbrándote a mí presencia. — Kim Hyong-Seo lo miro con burla cuando lo escucho gruñir en desacuerdo.

Park lo sabía, era su culpa.

Si bien, había podido obtener el perdón de la mayoría de sus hermanos con el dinero que consiguió vendiendo los repuestos robados del auto de aquel imbécil. Era un buen motor, pero una carcasa rayada por su navaja le había bajado un poco el precio. Aún así no logro salir impune con todos, y con "todos" se refiere a Jung le había dado de baja en las carreras de motos por el próximo mes, tenía prohibido pisar zona neutras y como si eso no fiera poco, ¡Hoseok tuvo la grandiosa idea de poner a su odiosa y entrometida prima, como su niñera personal!

— ¿Qué haces aquí?, Todavía me quedan diez minutos. — la miro cruzándose de brazos.

— Ni creas que fue para verte a ti. Ponte feliz, saldrás más temprano y "te he vigilado todo el día". — la chica hizo comillas con sus dedos. — Ve por tu chaqueta de badboy, esfumate.

— Todavía no acaba mi turno.

—A ver, te estoy diciendo que te puedes ir antes, ¿y no quieres? — levanta una de sus cejas. — Desde que llegué no parabas de quejarte de esta mierda. ¿Qué cambio ahora? — al ver la mirada inquietante del su primo, sonrió con insinuacion. — Ah, entiendo. ¿Es alguien por quién esperes, primito hum?

Park frunció el ceño.— ¿Qué estupideces dices?, tengo que cumplir mí maldito horario, ¿Para eso no estás tú? Para ser un maldito topo con el prez. — le dice con voz baja. — haber si así lo enamoras de una vez

Kim Hyong-Seo gruño en advertencia. — Cállate la boca.

Ambos se sostuvieron la mirada mientras  feromonas molestas de alfas dominantes brotaban de ellos. Park había dado en un punto bajo y lo sabía.

— Sabes, no estoy para juegos de niños, has lo que quieras. — levantó las manos como señal de rendición la fémina cansada. — Iré a ver si hay alguna cosa que hacer.

Park solo espero que su prima se marchase para volver su vista hacia al móvil. Solo le quedaban tres minutos... ¿No vendría? Un momento, ¿Por qué sentía decepcionado?, No debería sentirse de esa forma, es obvio que ese niño se distrajo con algo más.