Atrapando al cuervo || ChanSoo [Terminada]

XII

Chanyeol caminaba de un lado de la puerta hacia la otra, Sehun le miró con el entrecejo fruncido y un pequeño mohín en los labios. Kyungsoo estaba en labor de parto, y debido a la petición del menor él como padre no había sido aceptado por el equipo médico del hospital.

—Estas poniéndome de nervios, Park Chanyeol, así que te calmas o te calmó yo mismo ahora.

—¡No entiendes! ¿cómo estará mi novio?

—Bien, está bien. Joder solo siéntate, no porque camines más rápido el bebé saldrá antes.

Antes de que Chanyeol pudiera llevarle la contraria a su nuevo amigo del equipo de archivos en la fuerza policiaca una enfermera con bata rosada y una sonrisa dulce le tomo del brazo.

—Felicidades papá, es un saludable niño. Su pareja le está esperando en la sala de recuperación, ya puede pasar a verlo.

—¿Todo está bien?

—Claro que, si papá. Su pareja fue muy valiente, durante todo el proceso estuvo muy calmado. Así que no se preocupe y continúe.

Chanyeol asintió, se despidió con la mano de Sehun para entrar a la sala. Lo primero que hizo fue caminar hacia donde estaba Kyungsoo con el rostro pálido, le acarició las mejillas y beso varias veces sus labios.

—Mi amor...

—Lo hicimos bebé, somos padres — dijo Kyungsoo con voz ronca. La cesárea lo había dejado agotado, habían durado dos años para poder concebir pero fue el tiempo justo para organizar sus vidas, incluso Kyungsoo le sacó provecho a su mala experiencia para crear un espectacular libro que había recaudado suficiente dinero que fue donado a una campaña de apoyo y acompañamiento psicológico a los familiares de las victimas del cuervo.

—Me dijeron... que es un niño...

Otra enfermera se acercó con un pequeño con ropita de color blanco y una cintica azul en la muñeca, el niño lloraba fuertemente pero tan pronto fue colocado en el pecho de Kyungsoo se calmó. Chanyeol abrió la boca acarició la diminuta espalda de su retoño abultando los labios, de sus ojos oscuros se deslizaron varias lágrimas de felicidad las cuales fueron compartidas por Kyungsoo.

—Mi amor... ven aquí, abrázanos.

Chanyeol no se hizo de rogar, abrazo a su novio y a su bebé mientras seguía llorando con emoción. En ese momento ingresó a la sala Sehun junto a Baekhyun para grabar el momento.

—Pequeño Park, mira como tus padres son unos llorones —, dijo Baekhjoon, un nuevo amigo de Kyungsoo, reportando el momento con un biberón en vez de micrófono.

—Así es —, Sehun enfocó el rostro mocoso de Chanyeol y como Kyungsoo le mostraba el dedo del medio —. Además de llorones... groseros, mal agradecidos. Estuvimos sentados por ocho horas esperando que naciera su hijo, mira bebé Park hicimos esto por ti porque eres bonito —, enfocó al niño —, pero no por tus padres.

—¡Largo! — sentenció Kyungsoo quien cubrió con su mano libre su rostro —, estoy sucio.

—No estas sucio, estas hermoso —, argumento Chanyeol tomándole de la barbilla para besar lentamente sus labios, su lengua se deslizo entre la boca del menor y su mano repartió pequeñas caricias en la zona de su pecho.

Sehun bajo la cámara y miró con asco a Baekjoon antes de indicarle que era hora de irse.

—Nos vemos el lunes, los dejamos por ahora. ¡Felicidades por el bebé!

Lo último fue dicho en coro entre Baekhyun y Sehun, los felices amigos salieron por la puerta al recibir la sonrisa de Chanyeol quien ahora lucía mucho más joven, saludable y sin estrés.

—¿Cómo lo llamaremos? — preguntó Chanyeol.

Los dos habían decidido no saber el sexo del bebé, y por ende tampoco habían pensado en un nombre en específico, Kyungsoo le tomo de la mano y abulto los labios.

—Park... Park Taeyang.

—¿Taeyang?

—Sí, porque nuestro hijo es un pequeño solecito.

Chanyeol sonrió, asintió totalmente de acuerdo con el nombre. Dejo su mano en el abdomen aún levemente inflamado de Kyungsoo y sus labios los dejo en el cuello del menor.

—El próximo bebé... quiero nombrarlo yo.

—Seguro quieres llamarlo Kyuchan o algo con nuestros nombres.

El mayor rio, tal parecía que nada pasaba desapercibido para su novio. Su amado novio, aquel con quien estaría para toda la vida.

—Me atrapaste....

—Solo si es niño...

Los dos se miraron, sonrieron con dulzura volviendo a unir sus labios. Esperaban que esta vez duraran menos de dos años para volver a concebir, pero mientras... un par de prácticas no les caería mal, pero esta vez para atrapar sus corazones.