Alphard Black y el trío P

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El Potterverso es de Rowling


Los Slytherin empezaron a llamarlas "el trío P" porque sus apellidos empezaban por P. Se hicieron bastante famosas dentro de las serpientes porque habían sido seleccionadas a la misma casa de forma seguida, algo muy poco habitual si no eran familiares. Incluso, gemelos eran seleccionados en Casas diferentes.

Nuestras tres serpientes compartían los Gobstones como pasión. Se pasaban las tardes jugando en la Sala Común después de hacer los deberes. O en su habitación, cuando los alumnos mayores, como Tom Riddle y sus allegados, echaban a los pequeños para mantener sus reuniones cerca de la chimenea. Los menores acataban las órdenes para evitar problemas. Además, al trío P le daba mala espina Riddle por el aura oscura que le rodeaba.

― Las pruebas para el equipo de Gobstones de Slytherin serán después de Navidades. Me lo dijo Lucretia. ― comentó Irma mientras hacía una jugada que venció a Poppy.

― Tenemos que entrenar mucho para que entremos las tres. ― contestó Eileen observando la partida.

La normativa impedía a los alumnos de primer año ingresar en el equipo de quidditch, pero les estaba permitido entrar en otros equipos o clubes más seguros, como el de Gobstones. Por ese motivo, nuestras protagonistas no paraban de entrenar; para que las tres fueran admitidas y ninguna quedara fuera. No sería lo mismo si faltaba una de ellas.

...

En el tren, Irma tomó una poción para el mareo recetada por la enfermería de Hogwarts. Prometieron mandarse lechuzas. Irma lo tendría más difícil porque vivía en el mundo muggle, sus padres eran squibs, pero les dijo que les pediría a sus abuelos que le prestaran la suya.

....

En la estación vio a Livia, quien le sonrió. Ambas se aparecieron en Prince Manor. En el salón, estaba Derneq.

― Es raro que Nelly no esté aquí... ― Siempre que Eileen regresaba a casa, Nelly la esperaba para recibirla y ayudarla a prepararse para la cena.

― Le dimos la libertad poco después de que te fueras. ― Derneq no levantó la vista de su periódico. ― Ya eres una bruja con varita, no necesitas que una elfina cuide de ti.

― ¡Es injusto! ¡Nelly era mi amiga! ¡No podéis hacernos esto! ― Eileen tenía lágrimas en los ojos.

Derneq se levantó y la abofeteó.

― Un Prince no es amigo de un elfo. Los elfos están para servirnos, no para ser nuestros amigos.

Eileen corrió a llorar a su habitación.

Nelly no solo había sido la elfina que la veló cuando aprendió a caminar y le cambió los pañales. Fue su primera amiga y su compañera de juegos. Con ella aprendió a jugar a los Gobstones y al ajedrez mágico y le recitaba las lecciones de su institutriz para memorizarlas mejor.

Llamaron a la puerta. Entró Livia.

― Querida, si quieres, podemos comprar otra elfina que se parezca a Nelly. ― se sentó a su lado y le masajeó la espalda.

― O Nelly o nadie. ― respondió de forma brusca.

Livia asintió y abandonó la alcoba.

Eileen siguió llorando hasta que se durmió. No la llamaron a cenar.

....

― De la ardilla podemos aprovechar sus huesos, su sangre, sus vísceras y el pelo de su cola como ingredientes.

Eileen apuntaba toda la información que recitaba su padre en un pergamino. Hoy tocaba los ingredientes que podían sacarse de la ardilla.

― Everard, siéntate como le corresponde al heredero de los Prince.

Su primo, quien tenía el pupitre unos centímetros más adelante que ella, puso la silla a cuatro patas de nuevo y enderezó a su espalda. Bufó. Derneq le miró rabioso. Se giró a la pizarra de nuevo.

La chica suspiró. Su padre no había tenido hijos varones, así que su sobrino Everard era su sucesor. No estaba interesado en las pociones, ni en el legado de los Prince; pero a Derneq no le importaba. Solo que fuera varón.

....

― ¿Te has juntado con gente de bien, hija? ― le preguntó su madre durante la comida.

― Con Poppy Pomfrey e Irma Pince. ― respondió su primo por ella.

― Los únicos Pince que conozco tuvieron un hijo squib, que se casó con una. ¡¿No será su hija?! ― preguntó Derneq alarmado.

― Pomfrey es el apellido de una sanadora de San Mungo. Nunca se casó. Así que su hija no tiene padre. ― comentó la madre de Everard.

― ¡Te prohíbo juntarte con ellas de nuevo! ― zanjó Derneq.

― Alphard Black, el heredero de los Black, también es mi amigo.

Eso último pareció gustarles a sus padres y tíos.

― Con suerte, podremos casarte con él.

....

En la fiesta del Ministerio, Eileen vio a Alphard, quien había acudido con toda su familia, al igual que ella.

― Walburga está cabreada porque Lucretia le ha dicho que la eligieron prefecta antes que a ella. Pero Lucretia renunció por su delicada salud. ― le susurró al oído.

Eileen reconoció a Walburga como la prefecta que la ayudó a encontrar un compartimento en el tren el uno de septiembre.

Bostezó.

― ¿Aburrido, verdad? ¿Exploramos el Ministerio? Seguro que encontramos un sitio más interesante que este salón.

Eileen sonrió ante la ocurrencia de Alphard.

Sin que nadie se diera cuenta, se escabulleron de la fiesta.

....

― ¡¿Cómo se os ocurre entrar en el despacho del Ministro?! ¡Habéis hecho saltar todas las alarmas!

Irma Black y Livia Prince regañaron a sus hijos delante del resto de ambas familias.

Irma le clavó una bofetada a Alphard.

― Mira que sentarte en la silla del Ministrio. ¿Qué pensará de nosotros? ― se alarmó.

― Vámonos. La cena empezará pronto. ― comentó Pollux.

Pese a lo ocurrido, Alphard era el heredero. Así que salió después de sus padres y antes que sus hermanos, quienes sí seguían los deseos de sus padres.

― Hice lo que me pediste, Padre. Juntarme con gente deseada.

Derneq la fulminó con la mirada y salió del salón. Eileen salió después de su madre y antes que sus tíos y primo; en el salón entraban por familias.

Después de no poder despedirse de Nelly y el rechazo de su familia hacia sus amigos, Eileen decidió hacer lo que le dictaba el corazón y no los deseos de los Prince.


Eileen y Alphard son peores que Harry, Ron y Hermione. XD

Se me olvidó decir que Eileen, Poppy e Irma empezaron Hogwarts en 1940.

Alphard y Everard van un curso por encima.

¿Qué os parece la familia de Eileen? ¿Encantadora, verdad?

Hasta la próxima

Eileen Prince: su historiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora