Que bello es el amor cosechado, ese amor sólido que echó raíces por el proceso, ese sembrado, regado y cuidado día con día. Ese amor que trasciende el enamoramiento de cuando todo es nuevo, ese que consigue enamoramos de lo cotidiano, ese que nos da paz y felicidad de conocer cada rincón del ser amado, ese amor que te hace brillar los ojos al verte en las mañanas al despertar, ese suspiro después del beso de buenas noches, ese amor perpetuo de querer sentirte conmigo cada día, ese enamoramiento de cada latido, suspiro y expresión, ese amor que te reconforta y apoya, ese amor que sabe tus fortalezas y cuida tus debilidades, ese amor que me hace desear tenerte conmigo siempre, saber que en ti tengo mi pareja de aventuras y refugio de los días de tormenta, esos amores que parecen de novela, y que engalanan más mi mente de saber que lo vivo en carne, ese amor que nos tenemos y profesamos, ese amor que para tí tendré eternamente