Ella (capítulo 6)

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Creo que mi mamá tenía razón, las  personas son muy soñadoras, está bien, sueña pero, no dejes tu presente descuidado por tus sueños, tienes que vivir cada minuto que pasa con la mayor intensidad, dedicación y empeño  para así vivir feliz.


Llegamos a casa, yo estaba totalmente cansado y ella igual, nos despedimos con un ligero beso en la mejilla y ella me dijo antes de irse.

-Gabriel, gracias.

-¿Por qué?

-Me haces feliz.

Gabriel sonrío y ella lo miraba un tanto sonrojada.

-Tú también.

-Hasta mañana Gabriel.

-Hasta mañana, descansa.


Gabriel se quitó la remera, calcetines y se dirigió a la cama, estaba cansado. Entonces empezó a recordar aquellos momentos vividos junto a aquella chica hermosa, aquella chica que tanto le gustaba, aquella chica que en poco tiempo amo.

-Me encantaría vivir aquí –pensó- junto a ella soy realmente feliz.

Luego de un largo suspiro tomo sus auriculares y empezó a escuchar sus canciones preferidas, cada canción le recordaba a algo o alguien, ejemplo, escuchaba Smell like teen spirit de nirvana y recordaba sus tardes en el tejado junto a su primo Alan, mientras jugaban videojuegos y pasaban largos ratos discutiendo sobre sus equipos de fútbol favoritos, de repente empezó a recordar la tarde junto a esa chica, las flores, las nubes, su mano tan dulce, y así pasó su noche, recordando a aquella chica que en ese momento era la causa de su desvelo, aquella chica que en poco tiempo amo.

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