𝑴𝒚 𝒃𝒓𝒐𝒕𝒉𝒆𝒓'𝒔 𝒇𝒓𝒊𝒆𝒏𝒅 [𝑱𝒆𝒐𝒏𝒈 𝑱𝒂𝒆𝒉𝒚𝒖𝒏]

18

Todo estaba saliendo de acuerdo al plan que se estaba creando. Karina y Yuta corrían el rumor de una fiesta a finales del mes en la casa donde había sido la bienvenida de Hang Mi. ¿La razón? La fiesta de cumpleaños de Taeyong, una excusa muy buena para reunir a todos en un solo lugar y que aquel infiltrado que tanto buscaban, llegara para acosar a Hang Mi. 

—Bien, todo esta saliendo perfecto. —algo andaba mal, Hang Mi lo sabía porque el simple hecho de sentirse observada hacía que su cuerpo entero sintiera escalofríos y no de los buenos— ¿Hang Mi? ¿estas bien?

No, sentía ese presentimiento de que algo podría pasar en cualquier momento. Y si sucedió. Su teléfono empezó a vibrar llegando demasiados mensajes en tan solo un minuto, todos mostrando demasiada obsesión y euforia por poder verla de nuevo de cerca. 

Número desconocido

>>Te ves preciosa, no sabes cuanto me emocioné cuando solo te vi con esa blusa desde la ventana.

>>Escuché que se va a hacer una fiesta para celebrar el cumpleaños de uno de tus estúpidos amigos, pero eso funcionará para poder verte de nuevo en carne y hueso de cerca, tan preciosa, hermosa y dispuesta a estar conmigo tal como lo recuerdo.

>>Te veré en esa fiesta, utiliza ese vestido rojo que hace lucir todo tu cuerpo y que volverá locos a los chicos, en especial a mi. 

>>KJW.

De nuevo sus manos comenzaban a temblar, pero de tan solo ver esos hoyuelos sonriendole a la distancia, supo perfectamente que su corazón y su mente estaba en otra parte. Yoonoh simplemente actuó frente a ella con dulzura, tal como si estuviera en una relación, llegó, besó su frente y la tomó de la mano guiándola hasta el aula donde claramente no había clases dejando bastante confundidos y sorprendidos a Karina y Yuta.

—Yoonoh, q-que.. —el la calló susurrando en su oído, haciendo que los escalofríos bajaran por su espina dorsal y que obedeciera al instante

—Sígueme la corriente.. —Hang Mi asintió sonriendo felizmente, pero esa sonrisa era la más genuina que él jamás había visto, como si sus penas se hubieran esfumado en tan solo un instante— esa es mi kitten 

Finalmente cerró puerta, cortinas y ventanas con seguro. No había manera de que observaran de adentro hacia afuera y viceversa, pero había una razón escondida en todo y Yoonoh no estaba tranquilo pues podría pasarle algo a ella. 

Él le hizo señas de que guardara silencio, quitó su blusa sin segundas intenciones y comenzó a rebuscar en los bolsillos algún tipo de micrófono y vaya que dio con él. En la parte inferior de su blusa, removió ese pequeño circulo negro de metal y lo rompió contra el suelo para evitar que los siguiera escuchando. 

—Dios santo Hang Mi. —suspiró relajado— 

—¿Qué haces tu aquí? ¿Qué fue todo eso? ¿¡Porqué siempre me estas confundiendo!? —Yoonoh tapó sus labios con su mano, mientras trataba de hacerla callar y explicarle lo que en verdad sucedía 

—Si me dejas explicar, tal vez no me odies tanto. —Hang Mi lo mordió con una buena razón haciendo que el contrario se quejara sin espéralo— así que, déjame hablar con la verdad y...

—Harás que caiga en tus mentiras para que tenga sexo de nuevo contigo, supongo que eso es lo que esperas. —Yoonoh sonrió con malicia, sostuvo las caderas de ella y la pegó a él haciendo que sus rostros quedaran a unos centimetros de distancia y que solo sus respiraciones se sintieran agitadas y ansiosas por lo que iba a pasar— suéltame Jeong. —siseo entre dientes

—Solo si me dejas explicar kitten, te prometo que después de eso, te dejaré tranquila. —asintió relajada, no por el hecho de que él se lo pidiera, sino por el hecho de que su colonia la había embriagado lo suficiente como para recordar esas dos noches en las que sus palabras se contradecían, claro que sabía usarlo bien— bien. —aclaró su garganta— esas fotografías no las hice yo

—Gran inicio de explicación. —colocó sus ojos en blanco debido a los comentarios de Hang Mi— sé perfectamente que no lo hiciste tu, las iniciales en la fotografía y en la carta 

—Lo sé, estuve espiando cuando hablaban de la carta y la fotografía. Iba a disculparme por lo que había sucedido desde la cabaña y luego en la fiesta, me comporté como un idiota.. —ella lo interrumpió

—Si, uno muy grande. —aceptó sin rechistar— me lastimaste

—Desde un inicio me hubieras dicho que tenías sentimientos por mi. —sonrió incredula ante sus palabras 

—Desde hace años te lo demuestro, te doy regalos, te llevaba botellas de agua a tus partidos, te enviaba mensajes diciendo y preguntando que si querías salir. ¡Nunca me contestaste! —no quería llorar, no frente a él, porque sabía perfectamente que iba a cambiar de opinion y querría estar con ella por lástima, no lo quería así— ¡solo quería que me notaras! ¡Que en algún momento, solo..... me dijeras que te gustaba

—Hang Mi.... —se soltó de él con dificultad pero suspirando al final 

—Creía que tal vez podría estar contigo, y cuando me propusiste ese trato, fue~ algo nuevo para mi. Perdí mi virginidad contigo, me sentía segura en la segunda vez que lo hicimos y a ti no te importó, me desechaste como a las demás. Como si fuera otra de tus putas a tu servicio. —lo había hecho, debía de admitirlo pero también iba a admitir que había estado pensando en ella y que no había podido estar con alguien más 

—Escucha, Kitten. —hizo una pausa— desde esa noche, en la fiesta, no he podido dejar de pensar en ti 

—¿Qué estas diciendo? —preguntó confundida

—Desde que estuve contigo esa noche, recuerdo cada cosa a la perfección, te lo juro. Como estabas disfrutando cada momento e incluso como me hiciste quedar asombrado por la preciosa y bellísima mujer que tenía encima mío. —con tan solo esas palabras, Hang Mi se ruborizó a tal punto de bajar su mirada al suelo y no querer levantarla— durante toda esa semana que me hiciste esperar por el trato, no pude acostarme con alguien más y la primera vez que lo iba a hacer, te imaginé a ti en la cama, de nuevo conmigo teniendo intimidad como la primera vez 

—Pero si de verdad querías estar conmigo, ¿porqué me alejaste? ¿porqué me dijiste que era todo sabiendo que fantaseabas conmigo cada noche? —Yoonoh no supo que hacer con esa pregunta, como responder o siquiera en que pensar— tienes miedo de admitir que te gusta alguien, de que tu reputación simplemente se arruinara 

—No es mi reputación, sino de lo que dirían de mi. —y ahí estaba, su orgullo y su ego que no querían que lo lastimaran 

—Debiste de pensar bien tu respuesta, no me hables más Yoonoh, porqué por más que me encantes y que quiera estar contigo en todos los sentidos...... aún no puedo creer que sigas pensando que tu reputación es más importante que los sentimientos de alguien más. —y salió de ahí sin siquiera darle una mirada de reojo porque sentía que su corazón estaba aún más destrozado y preocupado, tanto por él como por Jungwoo