Capítulo 10

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(Alexandre)

— Déjame verla, es mi prometida - ruedo los ojos

— Ella está descansado - le recuerdo mientras leo un libro sobre los oscuros

— ¿En tu habitación? ¿Me crees tonto?

— ¿En serio te gusta Mara? - me le burlo, sus mejillas se ponen algo rojas - Joder, en serio te gusta

— Es mi prometida y debe de estar conmigo - cierro el libro, lo miro, él está impaciente desde que mara se desmayó, no necesitaba llamar a un doctor, necesitaba llamar a una bruja, así que llame a vivián, aún está adentro con ella y si, ella está en mi habitación porque para mí no hay nada más seguro que ello

— Sobrino - entra vivián a la oficina - ella va a estar bien, solo fue un desgaste, cuando durmieron sus poderes ella no podía hacer magia por obvias razones, ahora que los vuelve a tener después de tantos y días y utilizar tanta magia en un solo hechizo la desgasto, asegúrate que descanse y duerma y coma bien, yo que tú, la tendría en el castillo, una bruja pura es muy difícil de matar, pero no imposible y es lo único que mantiene a salvo este reino

— ¿Quedarse en este castillo? Jamás, ella es la futura reina de otro reino, tiene obligaciones que cumplir

— Y por eso el compromiso se rompe - mara entra en la habitación, su vestido blanco está algo sucio ya,

— ¿Qué? - habla Gilberg

— Así como escuchaste, el compromiso se rompe - Los dioses me escucharon

¿No que no te importaba?

Cállate

— ¿Me dejas? - el trata de acercarse a ella 

— Mis padres ya deben de saber, que fui yo quien lanzo ese hechizo, van a venir por mí, no puedo irme, si este es mi único lugar seguro... — ella me mira, lo sé, lo sé, ella se va a quedar aunque yo no quiera

— este reino es el único lugar seguro, ahora en el mundo - dice vivián - sobre todo si ellos se están multiplicando

— ¿multiplicando? - pregunta Michael

— Los seres oscuros pueden envenenar a humanos, volviéndolos, sus seguidores, ellos se convierten en sombra, la sombra que ellos manejan a su antojo, esa es la oscuridad 

— ¿quieres decir que irá a reinos sin protección mágica? - Mara asiente a mi pregunta

— Hermano, tengo que ir por angelym - me dice Edwin y yo asiento - mi ejército y mi tecnología te acompañan, tráela, esto va a parecer dramático, pero parece el fin del mundo

— Te acompaño - dice Mara, pero la detengo

— Tú te quedas, tienes que dormir y comer bien, vivián, tú trae ese maldito oso de peluche, Michael, ¿sabes hacer hechizos de protección?

— Algunos, sí, ¿por qué?

— Acompaña a mi hermano, asegúrate de que todo esté bien, Carther, trae a todas las brujas que vivan en decronthre - mara está a punto de hablar, pero la detengo - acuéstate a dormir, tú vas a entrenar a las brujas - mara mira a vivián, vivián no para de verla extraño, Mara se ve preocupada

— Iré a mi habitación - dice mara pero niego

— Ve a la mía, tenemos que hablar - Ella se cruza de brazos

— Se te está subiendo a la cabeza eso de ser rey, no me puedes mandar las veces que quieras, me voy a mi habitación, si quieres hablar, pues ve a la mía - Ella se va muy digna cosa que me hace gracias, veo a Gilberg

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