Incontrolable

Capítulo 8

(Alexandre)

Tomo a esa perra por la garganta, ni siquiera recuerdo su nombre y eso que a veces me la follaba, veo de reojo como Mara abraza a su supuesto hermano, hay algo que no me da buena espina de él, igual no voy a arruinar su momento, tampoco es que me importe mucho, apenas y si la conozco, aunque sus ojos volvieron a brillar

— Mis padres - dice Mara, la veo algo pálida - Ellos lo escondieron acá y creo que con ayuda de tu abuelo - frunzo los labios, debe de tener razón, no hay otra manera de haberlo hecho, sobre todo si fue por la época cuando yo aún era un niño

— A ti, te voy a cortar la cabeza - le digo, me levanto, veo el silencio incómodo que hay y ruedo los ojos

— No - muevo mi dedo - Tú te vas con tu prometido, tu hermano lo puedes dejar, pero a ti - me acerco a ella - No te quiero cerca de mi castillo, de mi reino, ni de mí

— Alexandre, solo será un día, está de noche - odio ese tono de voz, odio como me mira en ese momento, odio sobre todo, no poder decirle que si

— Yo te debo algo, vámonos - empiezo a caminar, me detengo cuando veo que nadie me siguen - Vámonos todos, en especial tú - señalo a la mucama

Caminamos por las grandes calles de decronthre, veo de reojo como ese tal Michael abraza a Mara, hay algo de el que no me cuadra, bueno, se ve que en realidad son hermanos, se parecen demasiado como para negarlo, pero hay algo... no sé, no me causa buena espina

Por eso, le dijiste que se quedara en el castillo, lo quieres lejos de ella

Cállate conciencia, no fue por eso, fue por los padres de Mara, sí, por eso

pronto llegamos a un coliseo, donde pasa lo que todos se imaginan, dejo que la mucama entre primero, la agarran unos guardias, aunque no quiera debo de poner a Mara a mi lado, Carther se encarga de Michael

pongo mi mano, en la espalda de Mara, siento como ella se tensa, pero no me dice nada, subimos al escenario, hay varias personas también en el escenario, pero muchas más esperando el espectáculo

— Buenas noches, decronthre - hablo en la mitad del escenario, mara este detrás de mí, mirando a un lado, donde están los guardias - Al parecer a muchos de ustedes se les está olvidando mis reglas, reglas irrompible

— La traición, por ejemplo - señalo a la mucama - Una traidora, merece morir, se le cortará la cabeza, cualquiera que trate de traicionar la corona, su castigo será la muerte, aquí no somos benevolentes

Veo como ponen a la mucama en posición, ella mira a mara, mara tiene lágrimas en los ojos, veo las intenciones de mara, de detener lo que está pasando, la tomo de la cintura para pegarla a mí, ella me mira con sus hermosos ojos, no, con sus ojos llorosos, cierra los ojos con fuerza cuando se escucha él bulla del público, ya no tiene cabeza

— Ahora, esto va para las familias de todos mis guardias, de mi ejército. La violación está prohibida, dentro y fuera de decronthre, igual que intentar hacerlo en una misión, está totalmente prohibida

— Por favor, majestad, por favor - en la punta del escenario hay un mar de mujeres, llorando, las hago a un lado con mi zapato, mara me mira algo confundida

Mara se me acerca tratando de hablar, pero el primer guardia está en posición, ella se detiene cuando él abre la boca

— ¡No me arrepiento! ¡Jamás me voy a arrepentir de lo que hice! ¡De lo único que me arrepiento es de no haberlo terminado! ¡Que se quedara en un intento! - me acerco a él, tomo yo la espada y sin pensarlo dos veces le quito la cabeza, manchas de sangre vuelan a mi cara