『④』𝐅𝐀𝐈𝐘 ❚ Camilla ya no es la tonta que se enamora, es la diabla que seduce y toma. Y Carlos... oh pobre Carlos. En definitiva no está preparado para enfrentar su pasado.
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━━━━ CHAPTER THIRTEEN ━━━━ La apuesta
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CAMILLA
Despertarme en la misma cama que Carlos se estaba volviendo un hecho muy repetitivo y mentiría si dijera que eso no me aterraba. Mentiría si dijera que la naturalidad con la que su brazo se posaba en mi cintura para atraerme más cerca de su cuerpo no me hacía sentir segura y cómoda al grado de dormir como una roca.
Mentiría si dijera que no lo eché de menos. Pero me prometí hace años que nunca más me dejaría cegar por mis sentimientos y esa es la razón de que ahora tuviese que huir de nuevo mientras él aún estaba perdido en su quinto sueño.
Salí de la cama y con pies de plomo caminé hasta el sofá para tomar mis vaqueros y colocármelos. Hice todo lo más rápido que pude pero eso no me exentó de vivir un momento incómodo esta vez, no. Yo no tenía tanta suerte. Estaba colocándome la otra zapatilla cuando el colchón sonó bajo el peso de Carlos que se removió inquieto, palpando el lado que yo había dejado vacío antes de abrir los ojos.
Pronto sus pozos chocolate cayeron pesados sobre mí, escudriñando mi rostro en tanto alzaba el tronco y se apoyaba sobre los codos.
—¿Pensabas irte sin despedirte?
Su voz ronca me desestabilizó un segundo y me hizo apretar los muslos cuando envío descargas eléctricas a lugares que no debía.
Maldito español hermoso.
Me aclaré la garganta tras echarle un vistazo al reloj digital sobre la mesita de noche.
—Son casi las ocho, quiero pasar a mi habitación a darme una ducha antes de ir a la pista.
—O podrías bañarte conmigo.
Moví la cabeza, volviendo a lo mío como si la imagen de su torso desnudo, su cabello alborotado y sus varoniles facciones aún relajadas por el letargo del sueño no estuviera ya grabada a fuego en mi mente.