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Entre Yoongi y Jungkook, era el menor el más perspicaz y cuidadoso a cualquier señal de cambio de comportamiento de sus hijos.

Por eso cuando escuchó la respuesta de Soobin enseguida se le encendieron las alertas. Así que Yoongi, por más que hubiera intentado relajarlo al respecto - y usado juego sucio para ello, a sabiendas de lo que había ocurrido por preguntarle a Hoseok por privado- no tuvo otra opción que contarle lo que había pasado con Soobin. Pues era eso, o acceder a la idea de Jungkook por regresar a Seúl de inmediato.

—Debo llamarle Yoon.

—Hoba me dijo que a penas y fue un empujón. No hagamos un mundo de esto. Además ¿no deberíamos dejar que se meta en problemas? No podemos sobre protegerlo.

—No me quedaré tranquilo. Yoon, mientras Soo sea menor, es nuestra responsabilidad, y si puedo ayudarlo a gestionar sus problemas o lo que sea, quiero hacerlo.

—A nosotros nadie nos ayudaba.

—¿Y qué? Solo por eso deberíamos dejar a Soo gestionarlo solo. Además, no olvides que tu me ayudabas Yoon, cuando los niños y adolescentes me molestaban, tu me cuidabas.

Yoongi abraza a su esposo y asiente entregándole el teléfono.

—Llámalo pero debes entender que Soobin esta creciendo y que no va a querer contarnos todo. Por supuesto, estemos para él, siempre que nos necesite pero Cariño, si no lo quiere hablar...no lo persuadas a que lo haga.

—Esta bien. Lo prometo. No indagaré si no me lo quiere contar.

[...]

—Hola...Appa.—Dice Soobin al atender la videollamada con Jungkook.

—Casi no puedo ver tu cara, despeja tu flequillo Soo...

—Appa, mmm...

—Yoongi, dijiste que era nada, pero mira como tiene la cara.—Yoongi se acerca a la cámara y abre los ojos mucho en cuanto ve la cara de Soobin.

—No fue nada Pa. En verdad ni siquiera me duele.—Dice Soobin y Jimin se lleva las manos a la cabeza.

El mayor había ofrecido maquillarlo para que pudiera disimular ante sus padres, pero Soobin se había negado queriendo hablar de lo sucedido con sus padres si estos se lo preguntaban. Así que ahí estaba Soobin, contando todo mientras Yoongi asentía y Jungkook se quedaba callado con una mueca en la cara.

—Debiste defenderte, Soobin.—Dice Jungkook sorprendiendo a Jimin, Yoongi y Soobin. Jungkook no era de los que solucionaba las cosas a golpes, por mas que pudiera hacerlo por el conocimiento de artes marciales que tenía desde sus veintes. —Mínimo, saber esquivar los golpes. Ya sabes que no se debe aplicar la violencia, pero tampoco te puedes dejar pisotear, cariño.

Yoongi sonrió y apretó la mano de su esposo, orgulloso de él.

—¿No me castigarán?

—¿Por qué debería castigarte? ¿Por defender el honor de Sun? ¿Por no haberte defendido cuando en casa nunca se te ha enseñado a alzar la mano? ¿Por no haber sucumbido a engañarme o esconderme lo que te pasa? Dime Soo...¿por qué tendría que castigarte?

Soo se hunde en el sitio y se siente conmovido.

—¿Por qué eres tan comprensivo Appa? Te amo, te amo mucho Appapi.—Dice el adolescente y se le escapa una lágrima que consigue limpiar rápido con el dorso de la mano, momento en el que Jimin gimotea detrás de cámara y corre a abrazarlo.

—No llores mi mocoso.—Le seca las lágrimas y Jungkook llama la atención de Jimin. —Ve a acostarte ya, despídete de tus padres.

—Buenas noches, los quiero.—Dice con la mano y Yoongi le manda un corazón con las manos, algo que hace reír y avergonzar a Jimin y Soobin.

—Aigoo, porque si yo mando un corazón todos ponen muecas y expresiones agrias. Uno intenta ser cariñoso y no le dejan...—Bufa el adulto y Jungkook se sienta en su regazo de lado para besar su mejilla mientras Jimin rueda la vista.

—Jimin, no influyas mal a mis hijos. ¿Querías cubrir todo esto? No me iba a molestar contigo, idiota. No les enseñes a mentir.

—Tranquilo papá luchón, le has criado bien. El mocoso de Soo es un ángel, literalmente. ¿Cómo es posible que sea tan buen chico? Agh, Hoba y yo pensamos que nos mentía sobre lo que iba a hacer esta tarde...

—¿Por?

—No sé, lucía nervioso—Comenta Hoseok sentándose al lado de Jimin para ver a la pareja por la cámara.

—¿Muy nervioso?

Asienten.

—¿Crees que sea una crisis de ansiedad de nuevo?—Jungkook pregunta a Yoongi.

—No sabría que decirte, ya sabes que es tímido, y le cuesta salir a sitios concurridos. Pero de no ser por el conflicto con ese tipo en los recreativos el lo hubiera pasado bien. Así que tal vez fue solo algo del momento.

—¿Soobin tiene ansiedad? No nos dijeron.—Dice Taehyung interviniendo en la videollamada.

—Es algo que hemos gestionado con ayuda y él lo lleva bien. Es por el TOC, aunque se ha tratado desde muy temprano es normal que tenga dificultades de vez en cuando y eso le cause ansiedad. —Dice Jungkook.

—Ya veo.—Dice Jimin. —Cierto, ¿ustedes conocen a un tal Choi Yeonjun? Al parecer es compañero de Soo.

—¿Es el mocoso que lo defendió, no?—Interviene Yoongi.—Nos estuvo contando brevemente.

—¿Pero lo conocen en persona?

Jungkook niega.

—Pues es lindo. —Taehyung le da un codazo a Jimin.—Tonto, es un crío, no me celes. Lo que decía, no sé...tienen mucho en común esos dos. Sus padres son gays como ustedes, y el chico lo defendió porque según, su padre le enseño a no dejar que abusen de los demás. Un chico con valores, claro que sí.

—Ah...¿y? —Bosteza Yoongi.

—¡Qué sería genial que se hicieran amigos Soobin y ese chico! Hacen buena combinación.

—Pues eso debe decidirlo Soo, Jimin-ssi. —Se ríe Jungkook.—Como sea, muchas gracias por haberse ocupado de mis hijos, ya nos queda solo hoy mañana, y ya regresamos a Seúl.

—¿Lo están pasando bien?—pregunta Hoseok y Yoongi levanta el pulgar.

—¿Cogieron en el piano?—Pregunta Jimin.

—¿Cómo sabes?—Dice Jungkook y Yoongi esconde su rostro en el cuello de Jungkook para luego colgar la llamada.

—Supongo, que adiós.—Dice Jimin mirando la llamada colgada.

Padre Casado | Secuela de Padre Soltero | Yoonkook libro 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora