15

1.5K 224 111
                                    

Se estaban acercando al pueblo, el día era bueno, hacia un calor bonito, perfecto para pasar el día en el porche de su casa, mientras veía a sus hijos jugar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Se estaban acercando al pueblo, el día era bueno, hacia un calor bonito, perfecto para pasar el día en el porche de su casa, mientras veía a sus hijos jugar.

Sus hijos le seguían de cerca, viendo todo con cuidado, como si cualquier cosa los fuera a atacar.

O lo fuera a atacar a el, veía a Fundy muy pegado a su lado, era un zorrito astuto y en cualquier momento esperaba que lo confrontara por su embarazo, pero en verdad deseaba que lograra decirles el mismo antes.

Se detuvo haciendo un pequeño conteo en su cabeza, observando que nadie le falte, todos a su lado estaban locos, contándose a si mismo, si alguien se le perdía no quería pensar que iba a suceder.

— Bien, estamos en una de las puertas del pueblo, no es la principal pero si la que conecta otras casas a este. — miro a todos con neutralidad — le envié mensaje a el líder de esta manada o grupo, como quieran decirles y a uno de los guardianes del pueblo.

Suspiro viendo a su bola de salvajitos, tenia de todas las edades, colores y niveles. Señor.

— En este pueblo manejo un cargo importante — la mirada de todos cambio a una de interés. — y se espera de mi una imagen presentable, no les digo que finjan, pero por el amor de Heberón no hagan una estupidez y si esto va para los mayores.

Solo consiguió un asentimiento leve de todos, sus caras eran serias, queriendo mantener la imagen.

Seguimos caminando con Quackity guiándonos, el pueblo en si era bonito, se veía espacioso y la gente se veía amable, aunque nos vieran con duda, no se les podía culpar, viendo el ambiente que se manejaba, se veían que en su vida han peleado en guerras o luchado por la paz de su nación ni mucho menos se preocupaban por sobrevivir día con día, todos aquí eramos guerreros, luchadores y conocedores del manejo de armas, gente que vivió entre la sangre, aparte que la mayoría eran altos, como yo y Wilbur o imponentes como Technoblade.

Observaba como todos se calmaban al ver a Quackity y como otros chicos de la edad de el se acercaban en forma de escolta.

¿Lo estaban cuidando de nosotros?

Sonreí con burla dentro de la mascara, viendo como los otros cinco tenían la misma mirada de burla reflejada en sus ojos, querer cuidar a una de las personas mas peligrosas del Dsmp era estúpido, ese hombre delgado, de porte fino y con muchos mas atributos, aparte de su cara suave marcada con la cicatriz. Era capaz de con un movimiento mandar al suelo a esos chicos, no porque su cuerpo sea mucho mas delicado y sensual que el de ellos, lo hacia una presa fácil.

Al contrario era peligroso, burlón y astuto, capaz de alzar una hacha sin miedo y aniquilar a sus molestias.

Aparte si es que este no fuera el caso y Quackity fuera tan indefenso como se veía, jamas podrían con ellos.

Desde el mas peligroso que era Technoblade, un adicto a la sangre con una fuerza que no solo se basaba en la física y una destreza en la espada, que destroza a cualquiera que se le pone en frente.

¿Alguna vez te han traicionado?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora