10.

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Pov Natasha:

Bucky se ha peleado con Steve, algo así entendí, pobresillo, supongo que ambos se siguen queriendo a su manera, pero sus peleas son cada vez más frecuentes.

Debe ser porque se relacionan entre sí desde hace unos 100 años.

— Llorar es de niños, brazo feo, así que deja de llorar y mueve tu trasero, ve con el otro James, eres casi tan insoportable como el —dijo Lia levantando la cabeza de su dibujo.

— Romanoff.

Con solo decir eso se quedó callada y miro hacia otro lado, ja, ahí la tienen.

— Lo siento Tío James, sigues siendo molesto y feo, pero fui mala —habló arrepentida y yo sonreí, Bucky acaricio la espalda de Lia y ella se alejo disgustada, Wanda entró riendo a la habitación.

— Hola... ¿Buck estas bien? —preguntó preocupada, el negó con la cabeza y ella de acercó a él.

Lia rodó los ojos, es la persona más celosa de la tierra, pero probablemente su reacción se deba a que además le haya prestado más atención a su "molesto tío Bucky".

Wanda se ha alejado de mí desde el cumpleaños de Lia, no entendió a esa mujer.

Luego de consolar a Bucky fue a prepararse un café y el muchacho dejó la habitación.

— Lo siento chicas... —murmuro y tomó a Lee en brazos.

Ella negó con su cabeza.

— ¡No debes salir con Bucky, es feo y tiene un poco de barba! —exclamó enojada y yo reí al igual que Wanda.

No menciono nada más del tema y comenzó a charlar con Lia.

Yo... solo observe, no tengo mucha intención de hablar con la sokoviana en este momento.

— Mamá, ¿entonces podemos? —preguntó Lia y yo la miré confundida.

— Que Lia quiere ir a dormir a mi habitación, pero quiere que tu también vallas —Explicó Wanda, observe a Lia, me miraba con un gran puchero.

— Esta bien, ¿Qué llevo? —contesté en un suspiro y Wanda e Lia sonrieron chocando los cinco.

Wanda negó con su cabeza.

— Nada, ya tengo todo —murmuro con una sonrisa.

— ¿Cuantos años tienes Wanda? —pregunté con curiosidad.

— 29 —contestó y yo asentí con mi cabeza confundida.

Realmente creí que tenía varios años menos...

— Pensé que eras más joven —contesté con simpleza y ella torció su cabeza sonriendo.

— Gracias... — le di una corta sonrisa y me acerqué a ver que dibujaba Lia.

— ¿Qué es eso? —pregunté de forma amable, ella sonrió observándome.

— Esta eres tu —un par de palitos y una mancha naranja en su extremo.

Si, supongo que se parece a mi, el dibujo es tierno.

— La que esta en el medio soy yo, por eso soy más pequeña —un esquema igual a "mi" pero más pequeño estaba a mi lado.

Pero había otro dibujito más a su costado.

— Y esta es Wanda —murmuro sonriendo y se acercó a Wanda a mostrarle el dibujo.

Sonreí con ternura.

Es tierna.

La amo.

— ¡A comer amigos míos! —la voz de Tony se hizo presente en los parlantes y Lia corrió hacia el comedor, mientras que yo ordené un poco el desastre que había echo Lee.

Wanda se acercó a ayudarme y le dí una leve sonrisa.

— Gracias —murmure en cuanto todo estaba en orden.

Ella negó sonriendo.

— No hay de que.

El silencio se torno algo incómodo por lo que comenze a hablar.

— Se nota que aprecias a Lia —hablé, no me malinterpreten la conozco por Lia, ella suele ser mi tema de conversación con todos, mierda, me acabo de dar cuenta.

Supongo que todas las madres lo hacen ¿no?

— Oh si, es un amor, algo intensa, pero sigue siendo tierna —reí ante sus palabras, note como ella sonrió ante eso.

— Si, ella puede ser, intensa cuando quiere, aunque trato de que se comporte un poco más, porque no quiero que tenga problemas con su compañeritos por atrevida —comenté y ella asintió.

— No creo que genere problemas la verdad, de todos modos solo tiene seis y tiene tiempo para corregirlo —habló ella de forma pensativa.

Supongo que tiene algo de razón.

— ¿Qué haces además de estar aquí? —pregunté con curiosidad, nunca la he visto afuera del complejo.

— Paso casi todo el tiempo aquí, no conozco a demasiadas personas, Piet murió y bueno, por así decirse las únicas personas de aquí que no les da miedo relacionarme conmigo son Lia, Steve, Pepper y Bucky y la mayoría de ellos no viven aquí, así que, no lo se, supongo que ver películas o tomar fotos de todo lo que veo —contestó ella con un tono triste.

— No te tengo miedo. —Solté y ella me observo y giro su cabeza para otro lado.

— no parece... —Lo dijo tan bajo, que apenas pude entender lo que decía.

— Dime que hacer para que parezca—hablé de forma alta, haciendo que ella se girará un tanto sorprendida.

— Solo...te veo sola, y aveces me pareces algo rara ¡Lo admito! Pero no creo que merezcas pasar tanto tiempo en tu cuarto y se lo que se siente perder a un hermano —exclame y ella me dio una leve sonrisa antes de entrar al comedor.

—Empieza por no actuar como una idiota el 100% de las veces —susurró en mi oído antes de irse.

¿Yo? ¿Idiota? ¡¿que le hice?!

Pff, supongo que deberé empezar a controlar mis acciones frías con ella ¡Pero no lo hago de mala forma! Simplemente... es mi forma de ser, creo.

No lo se, no me crié con amor ni con alguien con quien hablar, me sale natural mirar con cara de culo a todos.

¡Pero eso no significa que actúe como idiota!

¿Soy idiota? Nahh. Creo.

— ¡Ven, Ma! —el grito de Lia llamo mi atención y camine hasta sentarme con ella.

Evite mirar a Wanda.

Mierda acabo de avergonzarme solita.

— Lo siento —le hablé a ella y ella solo sonrió riendo.

— No lo decía de forma despectiva Natasha, solo, cuida tus miradas —murmuro ella.

¿A que carajo se refiere con eso?

No me da el valor para preguntarle.

— ¿Mami puedo tomar un poquito de gaseosa? —preguntó Lee y giré a verla.

— Solo, no te tomes la botella entera.

Ella me dio una sonrisa y se sirvió un poco.

La bruja me deja pensando cada vez que hablo con ella... genial.

The heart of mine.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora