La oscuridad de abajo

Capítulo 29: Un trato con fuego

"La edad es la gran debilidad de la humanidad. Solo tenemos un tiempo limitado para tener éxito en la vida. Hacemos lo que debemos, fallando a menudo, pero también encontrando gloria y significado a la vida. Cuando tu esperanza de vida excede los límites humanos, cuando ves tus ciento veinte años con tus facultades físicas y mentales intactas, algo ocurre. Se vuelve más difícil cuidar a las personas, más difícil recordar que toda vida es preciosa. El amor por tus semejantes es importante sin importar tu edad. Nunca olvides esto, no importa la edad que tengas, especialmente si el mundo es cruel".

—Extracto de 'My Eclipse' de Hawkmoon.

El mundo de Shouto Todoroki es uno de dolor en este momento. Apenas puede entender por qué hay una hoja oscura a través de su torso, todos los que amo me traicionan, o las palabras que Izuku está diciendo: ¿un sacrificio de amor? ¿Qué amor es este? Te cargué en mi espalda y te protegí, porque nada de eso tiene sentido.

Tose, la sangre escapa de sus labios.

Izuku es muchas cosas; amable como el sol del mediodía y generoso en formas que dejan a Shouto sin aliento. También está clínicamente loco y atormentado por todo lo que ha experimentado en este lugar, llevado a la violencia y la lógica loca de este lugar.

Pero él no es malvado, no es un traidor. No como su madre, sus ojos grises llenos de locura. Lo siento, lo siento, lo siento.

Él fuerza sus labios a trabajar. "¿Por qué?", susurra con la fuerza que se agota rápidamente en su cuerpo.

Siente que Izuku se inclina hacia adelante, su cabello verde roza la mejilla de Shouto. "Verás, pide un sacrificio de amor".

El mundo explota en oleadas de dolor y agonía.

Apenas tiene la fuerza para mirar hacia abajo y ver la gran herida a través de su costado, sangrando profusamente. No tiene fuerza para mantenerse erguido y se derrumba. No duele tanto como él pensaba. O tal vez eso es porque el dolor en su alma es mucho peor.

"Te amo, Shouto", por qué, por qué, por qué todos me traicionan al final, "pero no tanto como amo a mi madre".

Y ahí está. Una verdad que Shouto puede entender. Que nunca comparará, no importa cuánto lo intente, no importa los sacrificios que haga por otro, simplemente nunca comparará.

Izuku agarra su cabello bruscamente, cruelmente, sin una pizca de remordimiento o compasión, y lo arrastra hacia adelante. Shouto mira fijamente la línea roja resbaladiza que hace su cuerpo, sin saber si la falta de dolor significa que está en estado de shock o no.

"Tienes mi respeto por llegar hasta aquí", dice fríamente su amigo, no un amigo, nunca un amigo, no confíes en nadie.

Su cabeza aterriza en el suelo, el dolor apenas se nota.

"Espero que te recuerden con cariño. Esto es por cada vez que me asfixiaste".

Se encuentra con los ojos de Izuku y solo ve una certeza fría y una indiferencia insensible. Es entonces cuando comprende que esto no es un complot, ninguna táctica que no sea la supervivencia egoísta. Lo siento, madre. Fuyumi. No soy lo suficientemente fuerte.

Cierra los ojos.

La patada lo sacude violentamente desde el borde. El dolor parece regresar de una vez mientras cae a través del vasto y vacío cielo púrpura, nubes de abigarrado azul-amarillo y arcos de relámpagos azules a su alrededor. Intenta respirar, pero solo llena su pulmón de sangre.

Cierra los ojos.

Voy a morir aquí.

La realización lo deja tranquilo, por extraño que parezca. A lo largo de todo lo que ha pasado en los últimos meses, ni una sola vez ha sentido realmente que iba a morir. Vuélvete loco, sí. Pero no perecer. No con Midoriya ni en su espalda ni caminando a su lado. Tiene sentido, entonces, que esta sea la primera vez que sienta el espectro de la muerte.