Capítulo 13: Los tiempos que olvidamos

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On es el primer pilar. Esto es reciprocidad. Significa reconocer y pagar las deudas que uno debe. Las deudas que nos atan son la base de cualquier sociedad. El poder en sí mismo es una deuda [¿Quién debe esta deuda, Dark Shadow?] Eso se debe a aquellos que son impotentes. Los grandes héroes de épocas anteriores encarnaron este ideal mientras luchaban con las grandes potencias para proteger a las masas perjudicadas por dictadores y señores de la guerra. A su vez, las masas liberadas usaron las energías para construir un mundo mejor sobre la base hecha por los grandes héroes.

—Extracto de 'Los pilares de la heroicidad moral' por Ryo Asuka y anotado por Fumikage Tokoyami.

El complejo está en las afueras de Mustafu y en una parte cerrada de la ciudad. En muchas cabinas y en salas de seguridad, Fukmikage Tokoyami puede ver guardias con rifles, con suerte de la variedad de balas de goma. El único factor unificador de los guardias es que todos tienen mutaciones y usan máscaras de animales de cerámica blanca en lugar de cascos regulares.

Presenta un sello con la insignia de UA y un membrete oficial del gobierno en el primer punto de control. La mujer allí lo inspecciona a fondo, dándole palmaditas, pasando su espalda por un escaneo de rayos X y obligándolo a mostrar Sombra Oscura para que incluso el demonio pueda ser evaluado.

Fumikage soporta esto pacíficamente. Puede criticar muchas cosas, pero no la diligencia. Ha visto fallas de seguridad en las noticias y conoce los peligros de cualquier cosa menos que profesionalismo.

Lo llevan a una sala de espera donde un hombre se sienta detrás de un escritorio, ardiendo los ojos naranjas caídos por el cansancio. Tiene una gruesa capa de pelaje corto en los brazos, el cuello y la cabeza. Nada extremo comparado con muchas otras mutaciones.

"Firma este formulario", dice el hombre, deslizando el formulario hacia Tokoyami.

Él lo toma. "¿Qué cubre?"

"Acuerdo de privacidad. No dices nada sobre las peculiaridades que tienen estos niños, y no revelas nada de su información".

Hace una pausa en una cláusula. "Censura formal en mi expediente heroico por una violación menor de información personal". Le da la vuelta a la página. "Expulsión si revelo sus peculiaridades. Y acciones legales hasta, pero no totalmente incluyendo cargos de poner en peligro a menores, homicidio asistido en caso de muerte y... cargos de traición".

"Es mucha responsabilidad". El hombre sonríe tristemente. "Pero creo que lo entenderás cuando los veas. Solo necesitamos protegerlos de las influencias negativas".

"Dudo mucho que Aizawa-sensei me enviara aquí si tuviera preocupaciones de que yo no pudiera manejar las responsabilidades". Firma el formulario, su firma elegante. "Y si tuviera que arriesgarme a adivinar, es muy probable que los niños tengan peculiaridades mutantes".

El hombre asiente una vez más y recupera la forma. El dorso de su mano tiene púas, pequeñas y afiladas, no gruesas pieles de mamíferos como Tokoyami pensó una vez. "Vamos a ver a los niños".

Él muestra a Tokoyami a través del complejo. Una cosa que señala es cómo se refuerza todo: un agujero que parece haber sido causado por un punzón muestra capas extensas de malla de acero entre capas de concreto y un material amortiguador; el suelo, aunque es de madera maciza en la superficie, muestra cemento donde una grieta profunda atraviesa el suelo; y los pilares de soporte estructural parecen estar hechos de un material polimórfico que emite un zumbido agradable cuando Tokoyami choca con él.

"Es una forma sencilla de seguirles la pista", explica el hombre después de ayudar a Tokoyami a levantarse. "Fuera de seguir la destrucción".

"¿Siempre son así ... ¿bullicioso?"

La oscuridad de abajoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora