Stuck

Capítulo 3

Something was strange from the start. Your eyes looked at me in a special way.
Even if I pretend to be arrogant, I keep stealing glances at you without realizing it. What's wrong with me?

Una simple revelación como esta no podía cambiar tanto tu vida ¿verdad? Bueno, era lo que yo creía, era un idiota a decir verdad. Lo suficientemente ciego como para no darme cuenta de lo obvio.

Como lo supuse muchos comenzaron a compartir sus resultados entre clases y grupos de amigos y la nuestra no fué la excepción. Inesperadamente sólo tres chicos resultamos ser omegas, la mayoría betas y solamente cuatro alphas, entre esos un gordo cabrón cuyo pasatiempo es meterse conmigo todo el tiempo. Ese mismo que comenzó a portarse extraño conmigo, como si quisiera llamar mi atención de una forma u otra, quiero decir, no parece tener nada mejor que hacer durante las clases más que joderme.

Quién sabe si esto ya estaba ocurriendo desde antes y no me había dado cuenta, estoy malinterpretando las cosas o es algo que no había sucedido antes pero esa mirada extraña tuya seguía puesta sobre mi, no importa en qué momento volteara a verte, seguía ahí. Traté de no prestarle atención a eso pero era imposible de ignorar el hecho de que Eric me viera así cuando seguíamos discutiendo (casi siempre por pendejadas) es raro, ¿querrá aprovecharse de mi ahora que sabe que soy omega? No lo sé, pero tampoco me sorprendería si así fuera. Como si fuera tan estúpido como para permitírselo.

Afortunadamente esto no afectó mi amistad con Eric, Stan y Kenny, y si bien era muy mal visto el hecho de que un omega se relacione con muchos alphas no nos importaba, seguíamos siendo tan amigos como siempre.

- Deberíamos juntarnos este fin de semana en mi casa. Ya saben, para ver películas y comer pizza.

Era jueves por la tarde, caminábamos de regreso a nuestras casas cuando Stan habló sobre un plan para el fin de semana. Suena bien, no tengo nada mejor que hacer así que acepté.

- No quiero una jodida pizza, hippie. Quiero pollo frito.

- Ni lo sueñes - me opuse a lo que Cartman dijo - te comerás toda la piel como el gordo de mierda que eres.

- ¡No me llames gordo hijo de puta!

Estábamos por comenzar a pelear (como de costumbre) cuando Kenny y Stan nos separaron antes de empezar a golpearnos.

Al final (y después de un rato de discutir sobre si deberíamos comer pizza o pollo frito) acordamos reunirnos en casa de Stan el viernes a las seis. Me despedí y volví a casa.