Capítulo 21

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- Lo que suponías era cierto. Me hicieron una prueba de sangre y... Descubrí que la razón por la que me he estado sintiendo mal esta semana es porque estoy esperando un hijo de Eric...

- ¡¿Que?!

Hubo un silencio luego de esa revelación. Me mantenía cabizbajo mirando al suelo y con esa sensación que combinaba el miedo con los nervios, mi mente estaba en blanco y mis manos y piernas temblaban por las sensaciones presentes.


- ¿Cuánto tienes de embarazo? ¿piensas tenerlo? - el silencio se rompió con las preguntas de Stan. Ni siquiera podía responderle, aún trataba de asimilar todo lo que estaba pasando - ¿Kyle?

- Ah, lo siento - suspiré, aún miraba al suelo y trataba de mantenerme tranquilo - tengo dos semanas y... S - sí deseo tenerlo... Yo sé que la situación ahora no es la mejor y que Eric no sabe que será padre pero... Trataré de hacer algo para que todo mejore antes de que nazca. Además te tengo a ti ¿no?

Por un momento levanté la mirada hacia Stan y le sonreí, sonrisa que él me devolvió y asintió. Fué en un semáforo en rojo cuando aprovechamos la oportunidad para besarnos por primera vez... ¿Y sabes que? No sentí nada, no sentí mi corazón acelerarse ni las típicas mariposas en el estómago, no sentí ese cariño que estaba siempre presente en tus besos. Además, él tampoco parecía querer hacerlo porque sintiera algo por mi, parecía que ambos lo hacíamos más porque "es lo que las parejas hacen" que porque realmente nos amemos. No había ese cariño que sentía cuando tú me besabas, era un beso sin ningún tipo de sentimiento.


Las siguientes semanas transcurrían con normalidad: Stan estudiaba, trabajaba y también había empezado a asistir a una terapia de rehabilitación para alcohólicos gracias al apoyo de su madre y un chico que no conocía pero que me prometió presentarme después; yo por mi parte seguí trabajando en el mismo lugar (aunque tuviera que tomar un autobús y hacer un viaje de casi una hora para ir a trabajar) ahorrando para lo que sea que mi futuro hijo fuera a necesitar y para pagar un doctorado de derecho en línea que comenzaría a tomar después de haber dado a luz. Seguía sin saber nada de ti y tampoco me daban ganas de hablarte ni siquiera para darte la noticia, en ese momento te culpaba por lo que pasó entre los dos y creía que era tu error el no tratar de comprender mi situación con mi familia y que si no podías entenderlo era porque no me amabas lo suficiente.

Las cosas con Stan iban aparentemente bien, nos llevábamos bien como siempre lo hemos hecho, las conversaciones eran igual de agradables como siempre había sido y nuestra manera de relacionarnos no cambió mucho desde que decidimos ser pareja, sólo que había un problema: al menos para mi eso se seguía sintiendo como una amistad en lugar de una relación de pareja.



















































































































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