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-!Joder carlos, que buena playlist!.-grite pero segura que no me había escuchado.

Hasta ahora, una de las mejores fiestas a las que he ido, la música estaba buenísima, estábamos todos bailando juntos en un círculo, la verdad es que no sabía de dónde había salido tanta gente.

Luisa estaba a un lado de mi, desde que nos conocimos, nos volvimos más unidas, hablábamos casi siempre, y como supe que estaba en España, la invité a venir, Lando también se lleva bien con ella, hemos formado una bonita amistad.

Tire a Carlos de la camisa junto a Checo para estar al medio de todos, nadie estaba más eufórico que nosotros tres, y si me ponen danza kuduro que esperan.

-!La mano arriba, cintura sola, da media vuelta, danza kuduro!.-gritamos los tres mientras seguíamos el orden de la canción.

-Morgan, no bailes así, que te miran mucho.-decía Lando acercándome a él.

-Que vean, por que es lo único que lograran.-le guiñe el ojo.

Seguimos bailando sin problema, quedandome al lado de Lando, porque no quería que bailara con nadie, mis pies dolían por lo que mientras sonaba limbo de fondo, fui a la barra a pedir champagne, y allí me quedé un rato hasta que llegaron dos individuos a mi lado.

-¿Ya no saludas?.-le pregunté al rubio a mi lado y él me miró apenado.

-No pensé que quisieras hablar conmigo, después de como te trate.-le di un sorbo a mi trago escuchando al francés, el monegasco se mantuvo en silencio.

-Todo bien Pierre.

-No, no está bien, lamento como me comporte contigo Morgan, no corresponde.-dijo él tratando de abrazarme.

-¿Estás borracho?.-trate de alejarme de él.

-Puede ser, ¿me perdonas?.-Charles lo alejo de mi, la verdad es que no quería que el francés me vomitara encima, tenía una cara de que iba a hacerlo.

-Perdonado, pero vuelve a tratarme así, y te cortaré tus huevos franceses, ¿oíste?.-amenace a lo que el rubio trago saliva y el monegasco ahogaba una risa.

-Copy that.

El francés se fue persiguiendo a una chica que le estaba haciendo ojitos, por lo que me quedé sola con el monegasco.

-¿Cómo estás?-preguntó él, sin despegar su vista de mi.

-Mejor.

-Das miedo cuando hablas en alemán.-solté una risa.

-me lo han dicho.-voltee al tumulto de gente que bailaba ahora bailando de Enrique iglesias, mierda amo esta canción.

-Ven monegasco, vamos a bailar.-Probablemente me arrepentiría luego de esto, pero el alcohol no ayudaba.

Creo que no había otra canción que explicara mejor como me sentía en estos momentos con Charles, cuando se estaba quedando conmigo puse esta canción, le dije que era de mis preferidas que busco la traducción en google, por lo que el monegasco se sabía la letra.

Inconscientemente me acerqué más a él, el olor a alcohol inundó por completo mis fosas nasales. El tampoco estaba en sus cinco sentidos.

-Yo quiero estar contigo, vivir contigo, bailar contigo, tener contigo una noche loca.-canta el en mi oreja cuando quede pegada a él con mi espalda en su pecho.-y besar tu boca.

El producía en mí algo que no podía controlar, cada vez que estaba cerca de él, sentía mis piernas temblar, con solo verlo mi corazón palpitaba de una manera descontrolada, sus labios se pegaron con los míos al terminar la canción.

The Faceless Driver - Charles Leclerc Donde viven las historias. Descúbrelo ahora