Mi muñeca

Capítulo 17: Una Noticia

Dos años después

Pía

Sonrío complacida al ver que he terminado mis diseños, me ha llevado casi dos semanas, pero ha valido la pena, estoy segura que les encantará a mis profesores. Desde que empecé a estudiar Diseños de modas, este año no he parado, me encanta crear, me gusta dejarme llevar por mi imaginación. Se que aún me falta un largo camino para perfeccionar mi trabajo, pero me siento satisfecha con los resultados del momento.

A mis dieciocho años he entrado a la Universidad, he decidido seguir en la misma ciudad, no me veo fuera de Italia, alejándome de mi familia y mi muñeco.

Aun no puedo creer que han pasado dos años desde que estamos de novios, hemos pasado por tanto, pero nada ha logrado separarnos.

Santino es tan maravilloso, que se encarga de enamorarme cada día, incluso amo que sea dramático aunque nunca vaya a reconocerlo delante de él , eso sería subir su ego.

Las cosas de Santino no se han solucionado del todo, ha visto una par de veces a su madre y hermana, a escondidas, ya que su padre sigue reacio a dejarle acercarse a ellas. En este tiempo han tenido varios enfrentamientos, incluso yo lo he enfrentado y le he dicho un par de verdades, pero ese hombre no parece querer entrar en razón.

No ha sido un solo abogado al que hemos recurrido, han sido más de veinte en todos estos años, pero nada, no hay nada que puedan hacer por él,  todos le han recomendado esperar a que Marena cumpla la mayoría de edad y entonces pueda decidir, pero eso suena tan lejano e injusto.

Mi suegra, Beatrice, ha intentado divorciarse, pero nuevamente su marido sale ganando, nadie la toma en serio, y tampoco puede irse ya que si sale del país o incluso de la ciudad le quitarían a su hija. Flavio Bianco se ha asegurado de que no quede ningún clavo suelto para que lo usemos a nuestro favor.

No entiendo el propósito de lastimar así a su familia, su esposa está deprimida con tantas cosas y con no poder ver a su hijo. Santino no puede avanzar del todo al estar en esta situación.

Ha entrado al internado hace dos años, es muy bueno en lo que hace, su equipo va ganando la mayoría de los partidos, su trabajo en el restaurante por las noches y su trabajo de medio tiempo con su tío le ayudan a cubrir el resto de la Beca. Ha tenido varias ofertas, hay representantes de clubes muy importantes que se muestran interesados, pero de la nada les dicen que lo lamentan,pero que han cambiado de opinión, y si, ambos pensamos que su padre tiene mucho que ver.

Me duele el alma ver como se desilusiona, como hay días en que me dice que esta cansado de luchar proque su padre siempre lo acorrala y le jode sus oportunidades.

Mi muñeco no la tiene fácil, no lucha contra cualquiera, lucha contra su propio padre.

-¿Qué hace mi muñeca?-pregunta esa voz inconfundible sacándome de mis pensamientos.

-He terminado mis diseños, y me he perdido en mis pensamientos.-le digo al tiempo que me giro para quedar frente a frente, él no tarda en rodearme con sus fuertes brazos y me permito disfrutar de su cercanía, de su aroma.-Pensé que estarías entrenando.-susurro contra su pecho.

-Nos han dado el resto de la mañana libre, han dicho que ya estamos listos para el partido del sábado.-me cuenta al tiempo que deja besos sobre mi cabello.

-Naciste listo, amor.-aseguro al tiempo que levanto mi mirada para observar el cielo de sus ojos.-¿Sabes que te amo?-le pregunto como él lo hace cada día.

-Esa es mi frase, muñeca.-me dice fingiendo indignación.-Pero puedo prestartela si me regalas un par de besos.-trata de negociar conmigo.

-Mmm... tendría que pensarlo.-digo fingiendo pensarlo.