29: Destellaban

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Martes.

Aquel día era un día de liberación absoluta.

Papá trabajaba hasta muy tarde, y podía invitar a Chifuyu y Baji a mi casa.

–Con permiso... –Ambos entraron a la casa.

Entré, y rápidamente les señalé el pasillo.

Quizá habían restos de sangre en la cocina y no quería que las vieran porque... Ya saben.

Los tres nos dirigimos a mi habitación.

–Oye Hanako-san, –Chifuyu habló, y yo me giré a verlo–¿Y tus hermanos y tu mamá?

–Mis hermanos fueron al cine con mi mamá, luego van a comprar, y volverán tarde.

–Oh, comprendo.. Es que no los veo hace mucho. –El rubio se rascó la nuca sonriendo.

Yo reí ligeramente. 

–Si, Keisuke me preguntó lo mismo ayer. 

El pelinegro asintió.

–Ahora que lo pienso... Nunca e visto a tu padre, Hanako-san. –Dijo Chifuyu pensativo.

Me tensé.

Cientos de recuerdos horribles se me vinieron a la mente.

–El papá de Hanako tiene cara de villano de películas. –Keisuke espetó.

–¡Baji-san! ¡No seas grosero! –Exclamó Chifuyu.

–Perdón Hanako.. –Baji bajó la cabeza.

–No te preocupes Keisuke, –Reí–Es verdad, si tiene cara de villano.

Porque lo era.

–Me gustaría poder conocerlo algún día, Hanako-san, seguro es un gran padre. –El de ojos verdes me dio una sonrisa.

Una sonrisa..

Sincera.

Inocente.

Dulce.

Yo solo asentí.

Intentando sonreír, pero solo hice una mueca.

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あなたのために:Para ti, Keisuke Baji (Completa </3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora