Cap.9

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La Luz que entraba por la ventana molestaba al pelinegro, quien de a poco fue abriendo sus ojos, estiro su manos al costado de la cama buscando a su acompañante, pero fallo al encontrarlo.

Entonces abrio los ojos y se sentó en la cama, recordando todo lo que había pasado. Sintió ruidos en la planta baja de la casa asi que supuso que era Jimin.
Se levanto busco su ropa viendo que esta estaba doblada en una silla al lado de una puerta y que arriba había un cepillo de dientes. Sonrio ante el gesto tomo las cosas y entro al baño.
Tomó una ducha, se cepillo los dientes y luego de treinta minutos estuvo. Entonces bajo las escaleras, y lo tapó un delicioso aroma a cafe y huevos revueltos con tocino.

Cuando llego a la cocina vio a Jimin de espaldas, este solo vestía una enorme camiseta que le llegaba a la mitad de sus muslos.
Jungkook sentia que se ponia duro de nuevo solo con mirarlo. Entonces carraspeo su garganta y Jimin giro.

Jm: Ho..hola.- Dijo nervioso.- Estoy preparando el desayuno. Puedes sentarte ahí.- Señalo las sillas que había al lado de la encimera.

Jungkook sonrio ante lo tierno que Jimin se veia nervioso. Se dirigio al lugar dicho y se sentó.

Jk: Hola, como amaneciste?

Jm: Bien y tu?- Contesto aun de espaldas.

Jk: De maravillas.

Jimin termino de preparar el desayuno y lo sirvió. Sentándose frente a Jungkook. Desayunaron en silencio.

Jm: Jungkook puedo decirte algo?

Jk: Claro

Jm: No tienes que seguir con la mentira. No es necesario.

Jk: Escuchame Jimin, lo dire solo una vez. Lo hago porque quiero y talvez no sea necesario para ti. Pero no quiero lastimar a mi hermano. - Se levanto y se dirigió hasta donde estaba Jimin.- Y puede que yo no quiera que sea una mentira.- Dijo y beso a Jimin.

Cuando se separo del beso Jimin solo lo miro con sus mejillas sonrojadas.

Jm: Kook.. Es en....

Jungkook lo interrumpió.

Jk: Parece raro ya que nos conocimos anoche, pero siento algo por ti.

Jimin solo lo miro y asintió .

Jk: Bueno me voy a casa. Tengo que ver si Tae llego bien.

Jimin lo acompaño hasta la puerta y se despidió con un beso.

Jungkook subio a su auto y se condujo sonriendo hasta llegar a su casa.

Mientras que el rubio daba saltitos y sentia que su pecho iba a estallar.

Si hay algún error me avisan.

Una Mentira Que Se Convirtio En AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora