¿Final Feliz?

La 532

—Antes de entrar a ver al jefe tienen que dejar sus cosas aquí, no pueden llevar teléfonos o cualquier otro aparato tecnológico - un hombre con un extraño atuendo recibió a dos hombres en la entrada de un edificio que a simple vista parecía normal.

—"Tiene que ser una broma" - Bakugou (5) sofocó una carcajada al ver las vestimentas del hombre —¿Estamos en la época de la peste o son parte de una secta? Ten cuidado idiota, o podrían sacrificar tu culo homosexual.

Todoroki (7) observó con molestia los ojos rubí que lo observaban con burla, por suerte nadie pareció notar que él no estaba escuchando las indicaciones del hombre frente a él y que en cambio escuchaba las burlas de un fantasma que solo existía en su mente.

—Pueden llevar sus armas, al jefe no le importa puesto que ahora serán aliados, pero no puedo permitir tecnología dentro - el hombre encapuchado observó el objeto que el de cabello púrpura cuidaba celosamente.

—Tengo que llevar esto - Shinso (3) presionó la laptop contra su pecho —Si no quieres que la lleve tal vez querrás ofrecerte voluntario para que tú jefe pueda ver cómo funciona mi producto.

—Bien, pero deja tu teléfono aquí - el hombre volvió a señalar el casillero —Ah y tienen que estar apagados.

Cuando el de cabello púrpura sacó su teléfono para entregarlo notó que tenía tal vez cincuenta llamadas de su trabajo, pero por el momento no podía hacer nada que se viera sospechoso frente a esos hombres; sin embargo, no lo olvidaría, sabía que tenía que tratarse de Izuku.

—No hagas nada estúpido - el neurocirujano observó a los ojos a su compañero.

—Solo te voy a cubrir el culo porque es mi parte, tú no hagas una pendejada o te dejaré solo - el heterocromático respondió con desdén.

...

—...Pero Shinso dijo... - Monoma observó un poco preocupado a las personas frente a él —Que vendría contigo dentro de dos días...

—Lo sé, pero ha estado tan ocupado con el trabajo que no quería ocasionarle más problemas - Izuku fingió lo mejor que pudo —Deberías verlo, es todo un profesional ahora, con su bata blanca y sus cabellos alborotados.

Kyoka observó con una sonrisa el brillo en los ojos del peliverde, cada vez que hablaba de su amigo parecía suspirar y sonreír como niño enamorado.

—¿Quién lo diría, no? - Monoma sonrió con ironía y les indicó con un gesto que lo acompañaran —Ese hijo de puta pasaba drogado la mitad del tiempo y la otra mitad la pasaba con su segunda adicción.

El rubio los llevó hasta una sala junto a la recepción —Todavía me pregunto cómo no se le calló el pene, creo que no es normal que alguien pueda cogerse a tantas MUJERES... - resaltó la última parte y observó de pies a cabeza al de cabello verde.

Por alguna extraña razón Izuku sintió escalofríos, él se preguntaba lo mismo sobre sus captores, pero no quería bajo ningún contexto arruinar sus recuerdos de Shinso con los de ese par de demonios.

—Si... Claro - el de cabello verde respondió incómodo.

—¿Cuánto tiempo llevas trabajando aquí? - Kyoka interrumpió lo que parecían ser comentarios lanzados a propósito por el doctor frente a ella.

Era extraño, Izuku era una persona muy dulce, normalmente le caía bien a todo el que conocia, pero ese rubio se estaba resistiendo, tal vez tenía algo personal en su contra o simplemente era un cretino.

—Casi tres años - el de ojos azules respondió con su aparente tono de superioridad perpetuo —Bien tengan estos, con ellos podrán pasar al área que quieran como visitas, mi turno ya terminó así que debo irme, pero no tendrán problemas... ¿A qué área quieren ir?