FLASHES | Enzo Fernández.

8

CAMILA

Al fin había llegado el día donde subían la lista oficial, es decir subían para los que estuvimos aquí estos días, los "nuevos" porque los jugadores ya estaban confirmados.

Y claramente estaba en la lista.
No podía describir lo que sentía o se me pasaba por la cabeza.

—¡estás adentro! —me abraza por detrás un Julián recién levantado, y si, son las 8 de la mañana y era su mañana libre. —Uf que mal sonó eso. —dice después de abrazarme.

—Nunca viniendo de vos —le digo dandole el abrazo más sincero y lindo del mundo.

Me había levantado con un Enzo a mi lado, como si estuviese en el paraíso literalmente. Habíamos pasado esa noche increíble y con muchas cosas por decir y ya dichas también, pero no con palabras.

Tenía miedo del decirle a Julián, tenía miedo del que podían decir de afuera. No entendía porque si nunca me importo pero también sabía que jamás había estado con tanta exposición. Hacía dos dias habían hecho una encuesta sobre la fotógrafa más linda de todas las selecciones y salí yo ganadora con el 87% de los votos.
Háblenme d exposición.

—¿estás feliz? —me pregunta Julián mientras salimos a las afueras del predio. Yo aún en pijama, que era una remera de la selección y un short demasiado corto. —Porque pareces preocupada.

—Si tonto —le pego cariñosamente mientras nos sentamos en el pasto. —Estoy muy ansiosa y con miedo, no sé me siento muy expuesta a todo. —confieso.

—Te entiendo kuku —me dice —es así al principio y te van a inventar romances con todos ya vas a ver, si es que no lo hicieron ya.

Nos reímos. Ay juli si supieras...

Se acerca un tucu correa sonriendo y con el mate en mano. —Eh no sabían que estaban despiertos —nos dice ofreciéndonos el mate. Amo su tonada Tucumana.

—Si amigo, estaba felicitándola porque al final si viaja con nosotros —le explica juli y el tucu pega un grito de alegría y me abraza. Me pongo nerviosa porque estoy de pijama. Me tengo que ir a cambiar.

—Graciasssss —le digo —demasiado tiempo sin mi, ustedes no iban a aguantar es la verdad, es el secreto que me contó Scaloni —les digo mientras ellos se ríen. —me voy a cambiar porque estoy en pijama yo.

Los dos asienten y me paro para irme. Pero siempre ... hay un pero.

—Esa es la camiseta de Enzo? —pregunta Julián a mis espaldas. Me muero revivo y vuelvo a morir aquí mismo.

—Si boludo no vez que dice 24 —le dice tucu sin darse cuenta de nada.

—¿Cami? —me habla.

—Ah si —le digo murándolos, Julián está extrañado y se que es porque sabe algo. —el otro día me la regalo porque le gané una apuesta a que le iba a sacar una foto donde justo meta un gol —miento lo más rápido posible e intento no tartamudear en el proceso porque Julián conoce cada uno de mis tics y de mis movimientos. Que mal que me siento.

—Ya debería saber que sos la mejor ese eh

Y ahí puedo respirar en paz, Juli se queda ahí hablando con el tucu y yo procedo air a la habitación y a ponerme una fecha límite para hablar con Julián . Tengo que decirle. Tengo que hablar con mi mejor amigo. Esto va a terminar mal. Y yo lo sabía.

Entro a la habitación y enzo sigue durmiendo, les juro que le sacaría una foto y la guardaría en mi corazón. Me tiro sobre él, haciendo que el susurre cosas incoherentes. —Mhhmmm